No importa a qué política de gobierno se adhiera o con la cual se simpatice. Siempre las transiciones o los cambios sociales, económicos y políticos repercuten en el sujeto y su sustentabilidad económica y laboral, con la consiguiente angustia de repensar si se va a poder superar, mantener o mejorar la actualidad que vive, más allá del color político que tenga.
En ese contexto, la incertidumbre aparece de manera natural y con el pensamiento atado a las fluctuaciones del dólar, o a las diversas crisis laborales que cualquier sociedad tiene. Y es justo allí en donde la perspectiva y capacidad de adaptación personal no debe diluirse.
Pautas profesionales para no perder lo más importante de vista: la fortaleza propia.
Según el cristal con que se mire
Como bien apunta la psicóloga Viviana Imperiale (Titular de la cátedra de Psicología Laboral en la Universidad del Aconcagua y disertante en diversos claustros académicos) "cada individuo responde desde su subjetividad frente a todos los procesos de cambio que se dan en la vida.
Cada situación laboral es única, y para nada igual al resto de los puestos de trabajo, ya que no es lo mismo aquellos que han sido afectados a una determinada gestión (y que marcan una época y un tiempo determinado para ejercer su trabajo) a los puestos en los que se puede permanecer más allá de un color político".
Repensar el nuevo panorama de cambios y sus repercusiones en el bolsillo y cotidianidad de las personas implica sin dudas, mayores niveles de estrés, pero también pueden resignificarse en nuevos desafíos y logros por concretar.
"A los seres humanos no nos gusta en general la incertidumbre buscamos lo opuesto, las certezas, pero eso tampoco existe en la vida...A toda esta situación de incertidumbre también hay altos niveles de estrés, y dependerá de cada persona cómo lo pueda sobrellevar. De todas maneras si hay algo que tiene el argentino es una gran posibilidad de resiliencia entendida en psicología, como la capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas. Hemos experimentado en vivo y directo la capacidad de adaptación a los cambios. De allí pasamos como ciudadanos muchas crisis, y la visión que se mantiene es seguir superando cualquiera que pueda venir".
- ¿De qué herramientas se puede valer un sujeto para poder lidiar con el miedo y la incertidumbre laboral?
- Existen herramientas y cables a tierra que ayudan a sobrellevar los momentos complejos tales como la familia o pareja, las amistades, los grupos de pertenencia, las actividades de ocio y prácticas saludables, entre otros aspectos.
- ¿En tiempos en donde la angustia laboral puede aparecer, el sujeto tiende a buscar trabajos extras al que ya tenía?
- En general las personas suelen quedarse más bien quietas ante este tipo de incertidumbre, se tenga el trabajo que se tenga. Ante el temor a lo nuevo que pueden implicar las transiciones, o de cómo pueden impactar los cambios socioeconómicos en cualquier etapa, muchos se paralizan en vez de buscar más fuentes laborales.
Además las transformaciones en este tipo de momentos son cambios que se dan en épocas en donde no hay grandes decisiones, en lo que concierne al mercado laboral. Eso sí, salvo aquellas empresas que contratan de manera temporaria a empleados, como las bodegas, sectores de hotelería o fábricas, por nombrar sólo algunos ejemplos respecto a trabajos de temporada.
- ¿Qué consejos se puede brindar a la persona para su vida laboral y en general, respecto a este contexto?
- Es muy importante que los sujetos estén preparados para los cambios y mutaciones naturales que ocurren. No dejarse estar en lo laboral, actualizarse de manera permanente, capacitarse de forma constante y salir del lugar de confort que implica quedarse cómodo en un puesto de trabajo, o en lo que se tiene son definitivamente cambios pilares, para que ningún cambio nos sorprenda con la guardia baja.
Resulta fundamental confiar en las capacidades que la persona ha ido adquiriendo en el transcurso de su vida, que esté atenta y estimulada para capacitarse, con la mejor predisposición y sabiendo que es necesario arriesgar de manera inteligente, para poder ganar...Se trata de ideas fuerza que guían actitudes y acciones que marcan la diferencia.
El plan B
Según sostiene el licenciado en Psicología de la Universidad de Buenos Aires, Alejandro Licht "en el terreno de posibilidades de salir bien parado de una crisis, para el psicólogo laboral lo más importante es tener otra alternativa".
Parafraseando, "la gente debe aprender a autogestionar su propia carrera laboral, es decir, en contexto de vulnerabilidad, es vital que uno mismo genere su propia empleabilidad, nadie va a llamarte para ofrecerte algo, eso se acabó... Por ello que es vital tener un plan B. Aparte de un trabajo formal y seguro, es necesario tener otros proyectos, puede ser un hobby, un sueño, algo que le gustaría hacer y que quizá, perdido un empleo, puede cristalizar como un proyecto económico sustentable, un proyecto en caja que pueda trabajarse ante una urgencia", explicó Licht.
"Pero para ello es preciso que el sujeto sepa evaluar las oportunidades de un proyecto, tener una visión global de oportunidades, y es ahí donde juega la formación, pero no sólo de capacidades y contenidos, sino de competencias, que son algo más profundo y psicológico, es algo actitudinal, y es cada uno, desde uno mismo, que debe encontrarlas".
