La polaca "Ida", del director Pawel Pawlikowski, recibió este domingo en el teatro Dolby de Hollywood el Óscar a la Mejor película de habla no inglesa.
La cinta, filmada en blanco y negro, ganó a la rusa "Leviatán", la estonia "Mandariinid", la mauritana "Timbuktu" y la argentina "Relatos salvajes".
"Hicimos una película sobre el silencio y el retirarse del mundo y la contemplación, y aquí estamos, en el epicentro del ruido y la atención mediática. Fantástico, ¿verdad? La vida está llena de sorpresas", dijo el director.
"Me siento honrado, estoy sorprendido y abrumado", agregó el cineasta, que en un intento por robar unos segundos más sobre el escenario logró agradecer a los distribuidores del film y a sus amigos polacos, "que ahora deben estar borrachos".
"Ida" trata de una joven judía cuyos padres fueron asesinados por polacos y que creció en un convento en la Polonia comunista.
El filme de Pawel Pawlikowski, ambientado en 1962, cuenta la historia de Anna. El personaje protagónico tiene 18 años y desde que quedó huérfana cuando era niña vivió en un convento. Cuando falta poco para que se convierta en monja, se entera que la hermana de su madre está viva. El argumento también se mete con las secuelas que dejó el nazismo.
Además de participar en la categoría de "Relatos Salvajes", "Ida" está nominada en Mejor Fotografía. Antes de llegar a Hollywood se quedó con el premio a Mejor Película de Habla No Inglesa en el BAFTA. La Asociación de Mujeres Periodistas de Cine, entre otros galardones. En la entrega de los Premios de Cine Europeo también se alzó con varios premios como Mejor Película, Mejor Director (Pawel Pawlikoski, que se quedó con el reconocimiento del público), Mejor Guión y Mejor Fotografía. También recibió reconocimientos en festivales como el de Toronto y Londres.