El domingo, los hinchas aplaudieron a rabiar la salida del equipo tras el 2-1 frente a Deportivo Morón. Fiel a la historia azul, se gozó y sufrió con igual intensidad, pero al final llegó la recompensa que tanto se anhelaba en Avenida Las Tipas. Y desde el banco, pegado a la raya, como buscando alguna sensación que el retiro le quitó hace unos años, Matías Minich, el responsable de que cuestiones tácticas dotaran a Independiente Rivadavia de otro instinto a la hora de buscar orden y correr riesgos: "Buscamos tener una sola referencia de área, Palacio detrás del 9, más gente pisando el área rival (mejor que estar es llegar) y buscando sociedades sobre los costados".
-¿Cómo estás viviendo el momento?
-Bien, con mucha alegría e intensidad. Ahora esperando el partido de Temperley y analizando el juego del domingo.
-¿Esperabas el llamado de la dirigencia o preferías seguir en tu nexo como coordinador?
-Mi intención es dirigir. Llegó el momento y estamos buscando dar una impronta al equipo. Creo que encontramos la forma de dar impulso a estos jugadores.
-Se consiguió un triunfo clave para sacar presión al equipo...
-Esto reafirma el trabajo que venimos haciendo con el plantel. Con un triunfo, siempre es más fácil trabajar en la semana. Nos sacó un montón de presión y nos permitió salir de ese lugar incómodo que es el fondo de la tabla.
-Es tu segundo interinato en el club...
-Me había tocado antes con la salida de otro entrenador. Somos los primeros hasta que la Comisión Directiva decida si continuamos o llega otro cuerpo técnico.
-¿Cómo era tu relación con Luciano Theiler?
-Muy buena. Ya habíamos compartido la primera temporada de Gabriel Gómez en el club. Después él se fue y cuando volvió me tocó colaborar con él.
-¿Se podía conversar y hacerle conocer cosas que no te convencían de su trabajo?
-Pasa que cuando llegan cuerpos técnicos de afuera, hay un trabajo que nosotros debemos respetar. Nos adaptamos a lo que ellos propusieron en ese momento.
-¿Fútbol vertical o más posesión de balón?
-Me gusta mucho el fútbol vertical; siempre con una primera intención ofensiva. Si no se puede, pretendo esperar el momento, pero siempre intentando en primera instancia atacar el arco rival.
-¿Te acordás tu llegada al club?
-Tenía 6 años; fue en 1989. Somos cuatro hermanos varones, yo el más grande y nos trajo mi viejo. Siempre le estábamos rompiendo la paciencia para que nos trajera a jugar al fútbol (risas). Como no había categoría en el club para mi edad, estuvimos un año en Petroleros y luego, en 1990, volvimos todos a Independiente.
-¿Y tu debut en la B Nacional?
-Fue con Luis Blanco como entrenador, en 2001, frente a General Paz Juniors, de Córdoba. Me tocó remplazar a Claudio Del Bosco y ese día también debutó el Negro Miguel Guerra.
-¿Se va puliendo la técnica en el caso de los goleadores?
- (Risas) Siempre le pegaba fuerte cuando me quedaba mano a mano y un día me agarró Daniel Garnero y me dijo: “No tenés que matar a nadie”. Desde ese día empecé a definir a colocar (más risas).
-¿Por qué dejaste de jugar?
-Las rodillas y los tobillos.
-¿Y no despuntás el vicio de forma amateur?
-Ya no puedo volver a jugar. Cada vez que lo hago, termino con muchos dolores. No volví a jugar desde entonces. Lo que lamento mucho es que no volví a jugar.
-¿Te arrepentís de algo en tu carrera?
-No, aunque me hubiera gustado jugar más tiempo. Eran otros momentos y era muy difícil; llegaban muchos refuerzos. Ahora hay un trabajo en el que los juveniles tienen más participación.
-¿Tenés ganas de seguir al frente del plantel?
-¡Totalmente! Los dirigentes lo saben, aunque uno respeta la decisión que ellos tomen.
Si creen que tenemos que volver al selectivo de inferiores, lo haremos sin ningún problema.
Buscando las “joyas” de la cantera
Hace un año, Matías Minich inició, con inversión privada, un trabajo que apunta a seleccionar los mejores jugadores de cada una de las divisiones menores del club del Parque. El objetivo es reconocer a las promesas que tiene la entidad entre sus filas y darles un entrenamiento más acorde al que reciben los jugadores cuando llegan a la segunda división del fútbol nacional. El proyecto fue presentado por el propio Minich y aceptado por la actual Comisión Directiva. "Generamos este proyecto de selectivo para encontrar los talentos de cada categoría; la intención es darle un entrenamiento superior, similiar al que reciben en la Primera Nacional", dijo el DT.
Hasta el momento, debutaron Enzo Suraci, Pablo Palacio y Lucas Fernández. "Hay otros pibes, como Enzo Mazal, muy cerca", cerró el exdelantero.