Es la primera aerolínea española que cuenta con este instrumento a bordo. Este material, con el que se puede tratar un paro cardíaco repentino, complementa el botiquín médico de emergencias ya existente y permite atender, con mayores garantías de éxito, un posible paro cardíaco durante el vuelo.
La aerolínea, tras disponer de la autorización necesaria emitida por la Agencia Estatal de Seguridad Española (AESA), ajustó sus procedimientos y capacitó a sus tripulantes de cabina de pasajeros (TCP).
La formación se ha realizado bajo la dirección del Servicio Médico de la compañía en colaboración con Previs Gestión de Riesgos como entidad formadora asociada al programa de formación del Plan Nacional de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidad de Coronarias (SEMICYUC).