Aunque las remodelaciones en el sector de prensa del estadio Víctor Antonio Legrotaglie no están finalizadas (luego de los destrozos causados por el fuerte viento Zonda de hace unas semanas atrás), la dirigencia mensana dio marcha atrás en su decisión de recibir a Quilmes en el estadio Malvinas Argentinas y el duelo finalmente se disputará en cancha del Blanquinegro.
La decisión fue tomada durante la noche del lunes, aunque ya corría por las redacciones la versión de que el estadio mundialista sería el escenario del encuentro que medirá a mendocinos y cerveceros, en el marco de la tercera fecha de esta Primera Nacional.
"Vamos a trabajar tal como lo hicimos en el encuentro ante Defensores de Belgrano", destacaron desde la Secretaría de Prensa del club.
Así, el Lobo, después del enorme triunfo ante Almagro, en condición de visitante, volverá a jugar el lunes por la noche, desde las 21.05, en su estadio.
En lo deportivo, el plantel conducido por Diego Pozo trabaja de cara a su próxima presentación y, aunque restan varios días para el duelo, no habría modificaciones con respecto al equipo que venció al Tricolor en condición de visitante.
La Lepra, con una variante
Por ahora no hay confirmación oficial, pero el bajo rendimiento que viene exhibien
do Rodrigo Ayala, sumado a algunas desatenciones defensivas que mostró Independiente Rivadavia en el triunfo ajustado frente a Ferro, 3-2, provocaría una modificación en la faz defensiva: Yair Marin ingresaría por el lateral, como marcador central, y Franco Ledesma pasaría a marcar el lateral izquierdo. En las próximas horas se verá.
