Obras llegó como líder del Apertura y campeón del Regional “A”; Andino aterrizó al parque San Vicente con la cabeza puesta en tratar de ganar o despedirse de las aspiraciones para una semifinal. Con estas dos premisas, Azules y Rojos saltaron al sintético del estadio Ciudad de Godoy Cruz con la idea de utilizar todo su repertorio y sacar provecho en un certamen que aún no tiene clasificados para las semifinales.
Hasta ahora los cinco equipos top: Vistalba, Andino, Manquehue, Obras y Alemán: tienen posibilidades para sacar los puntos necesarios y quedarse con uno de los cuatro pasajes para la próxima etapa, previa a la gran final.
En un torneo tan parejo y de alto nivel como el doméstico de caballeros, una pestañada puede ser letal y ayer Obras perdió un partido muy importante, por “distracciones” que no deberían ocurrirle a un equipo acostumbrado a estos trotes. En la vereda de enfrente, los Azules aprovecharon esas pequeñas torpezas y resolvieron cuando tuvieron que hacerlo y además pegaron en los momentos justos.
En el primer cuarto, Obras se fue con todo a buscar el gol en el arco de Martín Dell’Agnola que con el transcurrir de los minutos se iría forjando como en una de las figuras de su equipo.
Los de camiseta roja tocaban, dribleaban, y aparecían por el área rival como si estuvieran en el living de su club. Pero en el momento de conectar la bocha, para que ésta tomara la trayectoria necesaria para anotar, fallaron o por mala puntería o porque como se dijo líneas arriba, el golero de “Rulitos” jugó un partido aparte, personal y de nivel alto.
Las jugadas mas jugosas estuvieron antes de los cinco minutos. En una, Barbeito envió la bocha muy arriba y en la respuesta Azul, Franco disparó apenas desviado.
Barbeito se agigantó en los últimos siete minutos, pero no pudo marcar. Los Rojos no le sacaron provecho a un par de corners cortos que tuvieron en ataque.
El segundo cuarto fue el más bajo de todos y Obras fue un poquito más, pero no tradujo sus acciones en ataque en el marcador.
En el tercer cuarto, antes de los diez minutos, Renzo Cavagnaro quedó con el grito de gol en la garganta justo cuando su tiro pareció entrar, sobre la línea, Pablos Bustos sacó la bocha con la lengua.
Empezó a ganar más movilidad y creo más peligro Andino con una combinación letal entre Matías Bustos y Matías Franco. En este lapso Andino tuvo un par de penalty corners pero no los pudo canjear por gol. El Eterno terminó jugando en las 25 yardas de su rival e turno.
El empate solamente le servía a Obras y dejaba fuera de carrera para las semifinales a los Azules. Cuando Obras se relamió por la igualdad, llegó la hecatombe para los Rojos.
En los último 15 minutos, de la mano de los hermanitos Franco aparecieron los goles necesarios para que Andino continuara con vida. Antes de los dos minutos Federico quebró el cero y casi al promediar la manga, Matías habilitó desde el fondo a Gonzalo y el “Diez” no erró. Gol y triunfo.
Los Azules esperan, calculadora en mano, que pasa con los otros equipos que aún les restan partidos en el torneo. Los dirigidos por Gabriel Gómez completaron todos.
