La principal conclusión es que un nuevo ciclo se avecina: el ladrillo se afianza como generador de valor y las proptechs se integran en colaboración para mejorar la experiencia de los clientes, ubicados cada vez más en el centro de la escena por ser claves para el repunte.
“Lo primero que uno va a notar en todo momento de inestabilidad, es la presencia de oportunidades”, comparte María Franco, Country Manager de la proptech Mudafy en Argentina. Para la ejecutiva, con las propiedades se puede hacer una gran diferencia, más allá de los vaivenes del mercado, al tiempo que se presentan como resguardo de valor predilecto en contextos adversos.
Con la complejidad del escenario mundial actual y una inflación cercana al 10% en Estados Unidos, guardar los dólares bajo el colchón puede significar una pérdida de valor de compra. Existe una oferta récord en CABA en torno a las 160 mil publicaciones, los precios de los inmuebles siguen a la baja y muchos vendedores necesitan liquidez en el corto plazo y están dispuestos a negociar propiedades a precios atractivos, haciendo que existan múltiples oportunidades en el mercado. Además, “para aquellos que tienen ahorros o la posibilidad de ahorrar mensualmente en dólares, no existen muchas alternativas de inversión, ya que el mercado de criptomonedas, acciones y bonos está muy inestable y para operar se necesita cierto conocimiento técnico”, agrega Franco.
Por un lado, están quienes buscan para invertir o para resguardar valor y, por el otro, quienes buscan una vivienda permanente: “los primeros encuentran oportunidades en barrios como Saavedra, Belgrano, Urquiza y Palermo, con tickets muy bajos y propiedades que se pueden refaccionar y dar valor agregado, pero que tienen dos características muy interesantes: son departamentos bien ubicados y con buena luminosidad, que, si el mercado no se recompuso para la venta, permiten la renta temporaria hasta que sea el momento de salir de esa inversión. Para quien busca vivienda permanente y cuenta con el dinero en mano, hay oportunidades en la mayoría de los barrios de CABA”, indicó Gonzalo Iribarren, de Iribarren Propiedades.
Y es que, a lo largo del tiempo, el ladrillo ha demostrado ser el producto noble para conservar el patrimonio. “El argentino y el ladrillo tienen una relación constante que no va a dejar de existir nunca”, sostuvo Pedro Moldes, CEO y cofundador de Grupo Moldes, y agregó que el principal objetivo es trabajar en los precios, así como “unificar los criterios de tasación y concientizar al mercado, generando una oferta más clara, organizada y reducida, pero con mayor interacción con la demanda”. Por eso, destaca el rol de las proptechs, empresas que desarrollan e implementan tecnología para aportar un nuevo valor al rubro inmobiliario. Según él, “llegaron para mejorar la industria, comprendiendo a todos lo que la conforman y logrando lo que es primordial: beneficiar a los clientes”.
Para Hernán Pisarenko, socio en Bridge Argentina, “el principal reto del sector es mejorar la experiencia de compra o inversión, con información de valor que posibilite una toma de decisión más profesional o que dé más garantías a los interesados. En este sentido, las proptechs inyectan mayor transparencia al mercado y las partes acceden a información de más calidad, a la posibilidad de comparar y, de esta forma, colaboran con los procesos comerciales. Las proptechs son fundamentales en esta nueva etapa del mercado”.
En esta línea, María Franco comentó que la empresa asegura “operaciones cada vez más simples y fáciles, favoreciendo la transparencia e impulsando la confianza mediante la combinación de tecnología con asesoría personalizada”. En su caso, brindan servicios cada vez más individualizados, ágiles y en línea con las necesidades reales de los clientes, optimizando tiempos y haciendo más efectivos y escalables todos los procesos. “Trabajando colaborativamente con nuestras alianzas inmobiliarias, logramos un mayor impacto en las ventas del sector”, sintetizó la portavoz de la proptech que mantiene un crecimiento sostenido en ventas del 20% mes a mes.
“El desafío es tener capacitación y preparación para afrontar las innovaciones del mercado y dificultades económicas que azotan a la región”, indicó Alan Pennacchio, de Pennacchio Propiedades quien, además, recomendó estar siempre un paso más adelante, innovar constantemente, estudiar el mercado, las finanzas, la economía global y nacional y amoldarse a las necesidades de los clientes, procurando satisfacer sus puntos de comodidad. “El mercado te va exigiendo lo que desea y, si no te acoplas a él, terminás estando fuera”, concluyó.
