El hormigón hoy en día en un material muy empleado en la arquitectura, principalmente por su simpleza, solidez y plasticidad. Quizás el aspecto que a nuestro parecer lo restringe en ciertos casos, es su color gris, muchas veces asociado con lo frío; sin embargo se abren nuevas posibilidades cromáticas y de color.
Usos
El hormigón pigmentado está concebido principalmente para soluciones arquitectónicas donde el hormigón va a la vista, pudiendo tener aplicación para todo tipo de obras y escalas en las que se quiere hacer del color un elemento fundamental. Lo que finalmente entrega el hormigón pigmentado es una nueva gama de posibilidades estéticas para la construcción, pudiendo ser usado en terrazas, pavimentos, muros y en todo lugar donde se desee otorgar un color permanente al hormigón, de manera rápida, fácil, y casi sin mantenimiento.
Cómo se pigmenta
Los pigmentos utilizados para mezclar con el cemento tienen que reunir unos requisitos imprescindibles, como son el resistir la radiación ultra violeta y ser estables al medio ácido y a la alcalinidad del cemento. Los pigmentos que actualmente se usan en esta industria son tres:
- Óxidos de hierro: tonos rojos, amarillos, negros y sus mezclas, naranjas, marrones.
- Óxidos de cromo: tonos verdes.
- Oxido de cobalto: tonalidad azul.
El coloreado de un cemento pigmentado es más natural que el efecto pintado. El consumo de pigmento en hormigón también está creciendo, orientado a mejorar el aspecto estético y reducir el impacto medioambiental de ciertos hormigones. Así podemos encontrar muros de hormigón ocres, pavimentos pigmentados, hormigones autocompactantes pigmentados, etc.
Dosificación
La dosificación orientativa de pigmento es un 3% respecto al cemento. Esto se mide así pues el pigmento se engloba dentro de éste, y su cantidad es definitiva respecto al comportamiento del pigmento. Se puede aumentar la intensidad de la pigmentación hasta un 10%, llegando al tono de saturación.
En hormigón la dosificación suele ser unos 10 kilos de pigmento por metro cúbico de hormigón. No se suelen utilizar dosificaciones más altas debido al encarecimiento del producto y por la adición de finos en la granulometría del hormigón. La adición del pigmento se puede realizar tanto en la planta como “in situ”.
La granulometría de los hormigones es suficiente para disgregar correctamente el pigmento, solo es necesario dejar un tiempo para un correcto mezclado, unos cinco minutos sería suficiente. Hoy, la pigmentación del hormigón es muy frecuente, ya que los colores tienen un impacto positivo en el estado de ánimo de las personas, y por lo tanto, les gusta la belleza que presenta un entorno lleno de color, y esperan que también los productos artificiales estén llenos de color.
Así pues, los fabricantes de pigmentos han mejorado sus productos a lo largo de los años para hacer que el coloreado de hormigón sea más fácil y fiable. El primer paso se dirigió a mejorar las formas de aplicación de los pigmentos, y como resultado se desarrollaron las micro-perlas libres de polvo y de partículas volátiles: los gránulos. Los requerimientos del mercado y una nueva definición de la actividad de los pigmentos condujeron a la creación de los “efectos gránulos”: preparados de pigmentos que también influenciaban en las propiedades del hormigón tales como la plasticidad, porosidad, compactación, resistencia a la compresión y absorción de agua, entre otras. Las mejoras en las propiedades del hormigón redujeron también los riesgos en la aparición de eflorescencias. Mientras otros los materiales para la edificación no estructural -como adoquines o tejas- muy a menudo se colorean, los elementos de prefabricado estructurales continúan dejándose grises en la mayoría de los casos. Esto se debe a que las estructuras de prefabricado se acostumbran pintar (a pesar de los posibles riesgos mencionados anteriormente) o bien se recubren.
Tecnología de punta
Nanotecnología en la producción de pigmentos para el hormigón. Se presentó en mercado recientemente una nueva gama de colores para el hormigón basada en la nanotecnología y nunca visto hasta ahora en la industria. El valor añadido de este tipo de nanopigmentos es el alto grado de resistencia a la luz, combinado con mayores rendimientos de color y un abanico de tonalidades innovadoras.
Gracias a esta mejora tecnológica se permite solucionar problemas de pérdida de propiedades estéticas, manteniendo así los colores su integridad. En el ámbito de la seguridad para la señalización vial, otro desarrollo innovador consiste en el hormigón de alta visibilidad fluorescente. Frente a condiciones de baja luminosidad este hormigón se ilumina, favoreciendo así la visibilidad de las señales viales o las salidas de emergencia de los locales comerciales o grandes superficies.
Como en cualquier innovación tecnológica, deberemos darle el tiempo necesario para que el proyectista y el constructor aborden esta técnica, en pos de un resultado estético más amigable y armónico. Seguramente, en un futuro no muy lejano, los hormigones a la vista exhibirán aspectos más dinámicos y serán protagonistas en la arquitectura, a partir de la incorporación de los pigmentos de colores y sus innumerables combinaciones.
* Director de CETArq, www.cetarq.com.ar