Las puertas son la carta de presentación de la casa y en gran medida pueden dotarla de personalidad. La madera es uno de los materiales más elegidos por su calidez y versatilidad en relación a tonos, texturas y posibilidad de manipulación.
De simple o doble hoja, completamente lisas o talladas, con curvas protagonistas, rústicas o elegantes. Sea cual sean las preferencias o propósito, lo innegable es que significan la fachada de una casa.
Hay una premisa que es crucial tener en cuenta y que muchas veces se olvida: el diseño para ser efectivo debe pensarse tanto en relación a la fachada como al interior de la casa. La puerta debe ser “puente” entre interior y exterior, debe representarnos, dar cuenta de lo que sentimos al llegar al hogar y lo que encontraremos adentro.
Habiendo abordado este punto, es preciso adentrarse en opciones de maderas y de diseños.
1. Picaportes y barras
Los picaportes y barras también juegan un rol fundamental, dado que pueden definir el estilo de esa puerta de madera. Para quienes buscan un look más “moderno” la dupla barra protagonista contrasta y puede crear una armonía entre la calidez de la madera y la frialdad y rigidez del metal. Ahora bien si la intención es tener una fachada más cozy, aparecen cada vez más barras y picaportes de madera, haciendo “juego” con la puerta.
2. Combinación de materiales
Vidrio y madera. Vidrio trasparente que permita ingresar luz al hogar o espejado que equilibre evitando la sensación de pesadez que puede provocar una puerta muy robusta. En ambos casos la incorporación al diseño puede “suavizar” la fachada.
3. Dimensiones y formas
Los grandes formatos y las líneas inesperadas siempre logran un juego visual llamativo que resulta en un acierto si de entradas se trata. Puertas curvas que nos adentran en una casa de cuentos, o dobles hojas que nos pueden adelantar el ingreso a un hogar espacioso en metros cuadrados como en sensaciones de amplitud. Si buscamos un estilo dramático un gran recurso es aprovechar la altura disponible y crear una puerta tan alta como la altura lo permita.
Por su parte el Arq. Diego García Pezzano, del Departamento de arquitectura de CADAMDA, acerca una serie de recomendaciones sobre los tipos de madera y tecnologías recomendadas para este tipo de usos y superficies:
- En la actualidad, las variables del cuidado de medio ambiente, ahorro de energía y cambio climático, que han tomado un fuerte protagonismo, nos plantean un cambio de enfoque.
- El uso de maderas de crecimiento rápido es la tendencia mundial desde hace muchos años. Nuestros bosques implantados (estos proveen el 90% de la madera empleada por la foresto industria en Argentina), principalmente de pinos resinosos y eucaliptus, nos aportan los materiales necesarios para este tipo de usos.
- En el caso de la estructura de marcos y hojas para puertas, el empleo de estas maderas en formato laminado, es decir, secciones realizadas a partir del encolado de pequeñas piezas, nos aportan un material de gran estabilidad.
- En ambos casos, los pinos elliottis y/o taeda y el eucalitus grandis, en formato clear (sin nudos) constituyen una excelente alternativa de terminación y calidad dentro de un contexto de cuidado de la biodiversidad de los bosques implantados
- De esta forma, podemos reservar las maderas nativas, para aquellos que prefieran algo clásico o de mayor valor, empleándolas en espesores muy delgados, dando así un aprovechamiento más eficiente de este valioso recurso natural. Así, la base estructural se materializa con maderas de bosques implantados y las terminaciones finales con maderas nativas.
Tips para proteger las aberturas y garantizar que luzcan siempre tal cual lo deseamos
La primera recomendación es asegurarse la protección de absolutamente todas las caras, incluso y por, sobre todo, aquella que está en contacto directo con el suelo, por ello es preciso aplicar el protector antes de instalarla.
Por otra parte, elegir la solución adecuada, según el efecto deseado, así como la resistencia pertinente para que la belleza de la madera dure más.
Asesoró: Cetol
