En línea con los cambios que nos atraviesan a raíz de la pandemia, las modalidades laborales sin duda se verán modificadas, evolucionadas. Aparece así el “trabajar en casa” como un formato que llegó para quedarse. Pero ese “desde casa” también tiene sus novedades.
El co-working ofrecido por firmas dedicadas especialmente a brindar este servicio fue tendencia pre cuarentena. Sin embargo, el aislamiento lo dejó a un lado dada la imposibilidad de moverse del hogar y las medidas sanitarias. Surge ahora un nuevo concepto y propuesta de espacios compartidos, dentro del propio edificio.
El trabajar con otros tiene beneficios innegables. Estar todo el día dentro del hogar puede resultar cómodo, pero puede traer aparejadas ciertas circunstancias que no son “amigables” con la creatividad, el pensamiento lateral, sumado a que implica una complejidad para generar un corte entre la vida personal y profesional.
Comienza a aparecer así una necesidad latente de generaciones futuras o incluso de nuevas modalidades de trabajo para dar respuesta a los requerimientos de un mercado laboral revolucionado.
Por ello los desarrolladores inmobiliarios se adelantan a esta situación, incluyendo en sus amenities un nuevo formato: el coworking dentro del propio edificio.
“Durante la cuarentena se dispararon exponencialmente las consultas sobre unidades con grandes espacios exteriores. Los edificios de oficinas y los de trabajo compartido sufrieron un impacto innegable. Los desarrollos con lugares propios para el co-working representan un aprendizaje de lo que pasó y lo que pasará. Las personas quieren tener un espacio personal para trabajar, sin que sea dentro del hogar, ni que requiera perder mucho tiempo o dinero en el traslado” destacó Manuel Mel, de Mel Propiedades.
Entre estos figuran desarrollos “all in one” o todo en uno. Se trata de una propuesta para los más jóvenes que buscan equilibrar vida y trabajo, que se anclan en encontrar el disfrute, las exigencias y responsabilidad de un modo simple y a su alcance. Cuentan con espacios comunes y amenities que no solo cumplen con estándares de diseño, sino que además ofrecen beneficios en términos de decodificación de necesidades de las nuevas generaciones, alternativas para trabajar adentro o incluso en un sector parquizado. Otras opciones ofrecen oficinas privadas, SUM in-out, terrazas parquizadas con parrillas y fogón, jardín con espacios privados en PB, gimnasio con terraza propia, piscina y solárium rooftop.
El COVID, las nuevas generaciones y la evolucionada concepción del trabajo, provocan una forma disruptiva al momento de crear espacios para vivir. Los metros cuadrados de una unidad se potencian con los servicios ofrecidos dentro del desarrollo, que ya no responden únicamente al relax. Estas propuestas de “coworking” dentro del edificio propio permiten ahorrar tiempos de traslado, sumando espacios de intercambio presencial con otros y al mismo tiempo, dan la posibilidad de salir de nuestro hogar durante la jornada requerida por cada uno, permitiendo una desconexión más concreta de la vida personal de la profesional. Cada vez son más los desarrolladores que se plantean la alternativa de convertir los SUMS en espacios de co working de día y de encuentro simplemente social de noche.
