Agustín Bellocchio, entrenador de vela de México, ofreció un consejo a quienes participarán en la prueba de la sede olímpica en las pruebas de vela y remo de semana en la contaminada bahía de Guanabara: "No se tomen el agua''.
"Cuando estén en la bahía cierren la boca y no traguen nada de agua'', dijo Bellocchio, de nacionalidad argentina que trabaja para México.
"Todos saben que está muy contaminada''.
Buena parte de la atención en los actos de prueba de las sedes de vela y remo se ha concentrado en evitar el contacto con el agua. Ante los informes de la grave contaminación en las aguas de Río los atletas reciben recomendaciones de doctores y sus federaciones para evitar enfermedades.
¿Qué tan difícil será lograrlo? Para darse una idea sería el equivalente de que los golfistas no tocaran el césped con las manos o los patinadores no tuvieran contacto con el hielo para evitar enfermedades.
"No es algo que se tome en cuenta en otras competencias pero en este caso claramente lo es'', dijo Peter Conde, director de desempeño del equipo australiano de vela.
Conde dijo que Australia ha instalado desinfectantes para manos en las embarcaciones de los técnicos.
"Cuando tocamos las cuerdas o tenemos cualquier contacto con el agua, tenemos que limpiarnos las manos'', dijo Conde.
Cuando se lr preguntó si esa era una medida habitual, Conde dijo: "Definitivamente, no''.
La polaca Malgorzata Bialecka, quien participará en la prueba de windsurf, dijo que en días pasados se lanzó a la bahía "y el agua no olía muy bien''.
"Tuve que nadar en esa agua y no fue agradable'', dijo. "Después de eso me dio un poco de temor''.
La contaminación de la bahía de Río ha estado bajo los reflectores desde que una investigación independiente llevada a cabo por The Associated Press durante cinco meses que se publicó el 30 de julio mostró que en el agua hay elevados niveles de virus procedentes de residuos fecales humanos presentes en todas las sedes olímpicas de deportes acuáticos.
Autoridades de Río han puesto en práctica medidas para recuperar la basura que flota en la bahía, ubicar residuos desde helicópteros y monitorear la presencia de bacterias. El COI se ha negado a respaldar las pruebas para detectar la presencia de virus que pueden causar desde males estomacales hasta enfermedades respiratorias que podían ocasionar el retiro de los atletas de las competencias.
Los organizadores locales y el COI se han negado a llevar las competencias de remo y vela a otras sedes más limpias.
Hace una semana, remeros que participaron en una prueba en la laguna Rodrigo de Freitas esterilizaron sus remos con cloro, colocaron sus botellas de agua en bolsas de plástico selladas y llevaron enjuague bucal antiséptico.
El doctor Nebojsa Nikolic, el más alto funcionario de salud de la Federación Internacional de Vela, se reunió el fin de semana con doctores de los equipos para recordarles las medidas básicas de higiene como vacunas contra hepatitis A y tifoidea.
"Francamente, los competidores están pensando actualmente en ganar medallas, no en prevenir infecciones'', dijo Nikolic.
Muchos equipos han entrenado desde hace años en Río con la esperanza de desarrollar inmunidad y varios han hecho estudios de calidad del agua. El fin de semana decenas de veleristas vieron como una mancha de color café se extendía por la bahía a pocos metros de donde se hallaban.
El australiano Nathan Outteridge, ganador de una medalla de oro olímpica, dijo el periódico The Australian que navegó a través de los residuos del drenaje para llegar al curso de la prueba.
"En realidad, no querrías encontrar cosas como esa'', dijo.