Opinión
José Hernández y sus mundos
La poesía de Hernández sumaba un ejercicio literario y político forjado a la luz de la observación directa, y del conocimiento de las formas de vida de la población rural.
La poesía de Hernández sumaba un ejercicio literario y político forjado a la luz de la observación directa, y del conocimiento de las formas de vida de la población rural.
En casi todos las épocas se verifica el regular uso político del pasado por parte de los dueños o dueñas del poder para activar recuerdos u olvidos en la memoria colectiva.
La expansión del turismo social (o de masas) abroqueló la montaña, la epopeya sanmartiniana y la vendimia como ejes organizadores de la oferta turística mendocina.
En su libro “El laberinto argentino”, el gran historiador económico, Roberto Cortés Conde, recientemente fallecido, ensayó reflexiones sobre un dilema que hasta hoy desvela a los argentinos: cuándo y por qué motivos la Argentina perdió la brújula para sostener niveles aceptables de crecimiento económico y bienestar humano o social.
El liderazgo social y político de Cipriano Benítez fue una novedosa experiencia de movilización y politización rural que pone de relieve la conexión entre caudillismo y bandolerismo como cemento de rebeldías sociales, imaginarios y prácticas políticas de los sectores subalternos en vísperas a la emergencia del sistema Rosas.
Una larga cadena de agravios por parte de la política revela con crudeza una visión utilitarista del conocimiento científico que confronta con las convicciones e iniciativas promovidas por los padres fundadores de la Argentina republicana que, paradójicamente, suelen ser invocadas más de una vez por el discurso presidencial.
la crisis política y social pone de relieve los azotes que padecen las democracias contemporáneas al develar la tensión entre los principios y reglas que las dotan de legitimidad y las prácticas, procedimientos o mecanismos que corroen el lazo representativo entre gobierno, pueblo o ciudadanía.
Ese universo de negros adoctrinados y disciplinados en el arte de la guerra en el campamento de instrucción ubicado en el áspero paraje del Plumerillo se trataba sobre todo de toneleros, zapateros, carpinteros, alfareros, sastres y peones de campo entre otros oficios.
El tiempo erigió al libertador en testigo del derrumbe del antiguo régimen europeo y en actor protagónico de las revoluciones que fundaron los cimientos de las republicas sudamericanas.
Finalmente, el Pacto ideado por el presidente Milei será firmado en coincidencia con el nuevo festejo de la independencia, justamente en Tucumán, la cuna del acta fundacional de la nueva nación de entonces.
Es habitual que el fútbol como ningún otro deporte despierte pasiones patrióticas. El torneo de fútbol de 1910 fue una de las tantas manifestaciones del ciclón patriótico que inundó los festejos del primer centenario de la nación y resultó ser la contracara de conflictos sociales y violencias públicas lideradas por los y las anarquistas refractarios del capitalismo o del patrón y del Estado, el padre o el marido.
Martín Miguel de Güemes fue clave en la guerra de la Independencia. Su estrategia militar permitió esmerilar el avance realista en Santa y Jujuy.
Es difícil conjeturar qué hubiera dicho Tulio de esta nueva Argentina y cuántos interrogantes hubiera planteado con su habitual ironía e inteligencia en tertulias, jornadas, clases, entrevistas o cafés. Qué tipo de relaciones habría propuesto con esa capacidad singular de penetrar en los pliegues del pasado. Sin ninguna duda Halperin habría mirado el fenómeno en su complejidad, es decir, sin simplificaciones y con una narrativa plagada de interrogantes y subordinadas interminables.
Las diminutas elites cuyanas insertas en una sociedad conmovida por las promesas de libertad y las guerras de revolución, habían resuelto tomar el destino en sus manos para organizar un gobierno propio que no era pensado como átomos escindidos, sino en reunión con otros pueblos o soberanías equivalentes.
Jorge A. Calle había edificado un perfil multifacético porque no solo dirigía la empresa fundada por su padre y ejercía el oficio de periodista. Promovía, además, actividades culturales y se había lanzado a escribir sus propios libros que tenían como actores protagónicos a dos cuyanos: el admirado Sarmiento y su antítesis, el fraile Aldao.
En el día internacional del libro, cada universidad nacional e institutos y centros de investigación del CONICET movilizaron ideas y acciones en vista a visibilizar el reclamo por la necesaria adecuación de presupuestos para garantizar el funcionamiento y sostener las actividades de docencia, investigación y extensión tal como lo prescribe la ley de educación superior.
Es difícil ponderar cual o cuales rostros de Julio A. Roca resultan evocados en el discurso oficial. Es posible que algunos rasgos prevalezcan entre otros en tanto el uso del pasado por parte de cualquier gobernante suele remitir a un tipo de operación discursiva de ocasión sin pretensión de veracidad o regida por los protocolos convencionales del saber histórico.
“Está entre nosotros”, el libro coral coordinado por Pablo Seman en el que participan historiadores y cientistas sociales del CONICET y distintas universidades nacionales, constituye una pieza indispensable del repertorio de publicaciones que permiten entender la manera en que el liderazgo plebeyo de Milei radicó en las multitudes argentinas expresando la versión local de la derecha radical que conmueve a las democracias occidentales contemporáneas.
El gobierno nacional confrontó con el feminismo en el Día Internacional de la Mujer para satisfacer especialmente las ideologías o creencias antifeministas de su círculo y una porción de su propio electorado.
En el mundo social, político y cultural en movimiento, la educación pública y las universidades estuvieron en el centro de la agenda de los intelectuales, las elites políticas y las burocracias estatales nacionales y de las provincias.
La intransigencia anidaría especialmente en la prédica del fundador de la UCR, Leandro N. Alem. Un perfil político dotado de estrictos principios morales y principistas que hizo gala de una vida austera y de la intransigencia un rasgo primordial de su accionar público. Esta última se hizo patente en la oposición sistemática a concertar alianzas o coaliciones porque rechazaba la idea de compromiso como herramienta idónea del desempeño político e institucional.
Entre tantas mujeres que forjaron la nación, vale recordar a tantas maestras y enfermeras integradas al mercado de trabajo que vigorizaron la conformación de las clases medias, y un puñado de mujeres letradas junto a pioneras del conocimiento científico.