El juez federal Claudio Bonadio procesó ayer con prisión preventiva a cinco excolaboradores del matrimonio Kirchner, en el marco de la llamada "causa de los cuadernos".
Hoy, el juez federal espera indagar al diputado Máximo Kirchner, de quien sospecha que manejó fondos ilegales para destinarlos a las campañas electorales del Frente para la Victoria, de 2013 y 2015.
Lo curioso de esta etapa investigativa iniciada después de que a principios de mes, Bonadio dictara 42 procesamientos, entre ellos el de Cristina Fernández, es que ahora la decisiones judiciales se fundamentan en dichos de los "imputados colaboradores" (arrepentidos) y no en las anotaciones atribuidas a Oscar Centeno, chofer del exsecretario de Coordinación del Ministerio de Planificación Federal (entre 2003 y 2015) Roberto Baratta.
Las nuevas prisiones preventivas alcanzaron a Raúl Copetti, Roberto Sosa, Ricardo Barreiro, Daniel Álvarez y Fabián Gutiérrez, todos ex secretarios privados y asistentes de Néstor Kirchner y Cristina Fernández. Bonadio los acusa de integrar la asociación ilícita que , según el juez y el fiscal Carlos Stornelli, recaudaba dinero entre empresarios ligados a contratos con el Estado. El juez ordenó embargos por entre 2.500 a 3.000 millones de pesos.
De los cinco procesados con prisión preventiva, solo Fabián Gutiérrez quedó exento de cumplirla. Tras firmar un acuerdo con la fiscalía que fue homologado por Bonadio, declaró en calidad de "arrepentido". Como viene ocurriendo, aquellos empresarios y funcionarios que solicitaron incorporarse a la figura de "arrepentido", continúan las secuencias del proceso en libertad. Gutiérrez fue secretario privado de la ex presidenta de la Nación.
“Existió el propósito colectivo para organizarse con el fin de cometer delitos en forma indeterminada y permanente”, sostuvo Bonadio respecto a los nuevos procesados.
El juez le atribuye un papel "en el traslado y ocultamiento del dinero ilícito obtenido por Néstor Carlos Kirchner y Cristina Elisabet Fernández", que según algunos de los indagados, era llevado desde la Capital Federal a Sante Cruz.
En el caso de Copetti, fue tesorero en Santa Cruz del Frente para la Victoria. Barreiro fue primero casero de la casa de los Kirchner en Río Gallegos y después, secretario de Néstor Kirchner. Alvarez también integró este círculo de colaboradores hasta 2010.
