Luego de décadas de ser alumbrado y ensombrecido por las luces y rascacielos de Manhattan, Brooklyn ha resucitado con todas sus fuerzas. Convertido en un paso obligado cuando se visita Nueva York esta zona se ha reinventado a sí misma y el resultado son barrios hispters, calles que exudan arte, una variada gastronomía, mercados y parques. Bienvenidos al distrito de moda de la Gran Manzana.
DUMBO, estética industrial y epicentro artístico
A orillas del East River y bajo el puente de Manhattan -toda una postal de la ciudad- se extiende el barrio de DUMBO cuyas siglas en inglés hacen alegoría a su ubicación: Down Under Manhattan Bridge Overpass. Antaño una zona portuaria relegada, sus calles con adoquines, sus edificios reconstruidos de ladrillo colorado y estética industrial recuerdan el pasado productivo de este barrio.
Sin embargo, sus murales, sus galerías de arte, sus negocios de diseño dan cuenta del presente creativo que se vive en sus calles. En 2013 comenzó un proyecto llamado DUMBO Walls que reunió a ocho artistas -incluido Shepard Fairey- invitados a pintar murales para embellecer el barrio. El resultado fueron graffitis que aportan color y frescura a las calles ubicadas en York St. y sus inmediaciones. Es que la mezcla de ese pasado industrial y su presente artístico, es una interesante mixtura que hace de DUMBO una zona ideal para pasear a paso lento disfrutando de cada detalle.
Otro de los atractivos del barrio es su amplia oferta gastronómica. Bares y restaurantes de cuidada estética se suceden e invitan a una pausa para disfrutar del entorno cinematográfico que nos rodea. Los amantes de la pizza tienen una cita obligada ya sea en Grimaldi’s (Front St. 1) o Juliana’s (Old Fulton St. 19), dos pizzerías enfrentadas -al mejor estilo de Capri y Trento en Mendoza- que se disputan por vender este manjar italiano. Tanto en una como en otra, la espera puede ser larga aunque sin duda vale la pena.
A pocos metros se ubica un Shake Shak (Old Fulton St. 1), este local que nació como un carrito de comida en Madison Square Park y que hoy posee diferentes filiales en la ciudad (y el país), se ha convertido en todo un clásico cuando de comer los tradicionales de la comida norteamericana se trata: hamburguesas, malteadas y, no olvidarse de probar, sus papas fritas con queso… toda una exquisitez.
El espacio verde a orillas del río, junto al Jane’s Carrousel, es ideal para un descanso. Apreciar Manhattan desde el otro lado del río, ir a la ‘golden hour’ como le dicen los neoyorquinos cuando cae el sol y los cristales de los rascacielos se tiñen en gamas de rojos y anaranjados, garantiza una postal única de ésas que tanto se lucen en Instagram.
Brooklyn Heights, el Brooklyn histórico
Esta zona residencial y acomodada de Brooklyn que alguna vez albergara a escritores como Arthur Miller, Thomas Wolfe y -hasta nuestros días- a Norman Mailer, nos muestra el lado más elegante del distrito. Sus calles arboladas parecen un refugio al gigante de concreto que se encuentra del otro lado del río. Sus 'row houses'-de color ladrillo, arena o blanco- nombre que reciben los edificios antiguos, antecedidos por escalinatas que hemos visto una y otra vez en películas, muestran el costado histórico de la ciudad.
La calle Hicks -entre Orange y Joralemon- es un excelente exponente para conocer el barrio. Se puede bajar por la calle Clark para emprender un paseo por el Promenade -con un largo aproximado de cinco kilómetros- que bordea el río y ofrece excelentes vistas del skyline de Manhattan, la Estatua de la Libertad y el Brooklyn Bridge. Los amantes del séptimo arte recordarán las escenas de las ya legendarias Annie Hall (Woody Allen, 1977), Moonstruck (Norman Jewison, 1987) o Satuday Night Fever (John Badham, 1977) que contienen escenas filmadas aquí.
El ícono citadino
Inmortalizado no sólo en infinitas fotografías, este puente que une Manhattan con Brooklyn también inspiraría a artistas de diferentes disciplinas como Andy Warhol, Arthur Miller, Jack Kerouac y Henry Miller, entre otros. Caminarlo de un lado al otro, que puede demorar media hora teniendo en cuenta el tiempo para fotos, es un paseo imperdible que permite obtener unas excelentes vistas de un lado y otro de Nueva York.
Inaugurado en mayo de 1883, tras catorce años de construcción, el Brooklyn Bridge se convirtió en todo un atractivo desde sus inicios. No sólo fue el puente colgante más grande del mundo -con 1.825 metros de largo-, sino también el primero suspendido mediante cables de acero. Para probar su estabilidad y seguridad en 1884 se realizó un desfile de 21 elefantes. Aunque hoy transitar por el Brooklyn Bridge es una actividad gratuita, hasta 1911 se pagaba un peaje de un centavo para peatones, cinco si se cruzaba a caballo y diez si era en carruaje.
Un detalle pintoresco: La inmigración italiana de principios del siglo pasado lo adoptó a su glosario, dándole un nombre familiar en italiano: Il Ponte del Broccolino.
Williamsburg, el refugio bohemio
Convertido en el nuevo epicentro de la nueva bohemia neoyorquina, este barrio de Brooklyn se ha transformado en todo un manifiesto hipster. Tiendas con ropa de segunda mano, de discos de pasta, antigüedades, librerías, restós de comida orgánica y bares…muchos bares han convertido a sus calles, para muchos, en el nuevo SoHo.
En Bedford y Berry Street se reúnen la mayoría de los pubs y gran parte de las tiendas de la zona. En Berry Park Bar (Berry St. 4) se puede disfrutar de una cerveza o un cocktail en su divertido rooftop. Aunque, sin duda, la oferta de lugares de todo el barrio no sólo es amplia sino también atractiva. La proximidad de Williamsburg al río, permite obtener unas excelentes vistas de la ciudad, ideal para acudir al atardecer o en la noche.
El fin de semana es el momento perfecto para visitarlo y asistir a alguno de sus mercados. Para los sibaritas, todos los sábados se realiza el mercado de comida y productos agrícolas Smogasburg. Mientras, los domingos, es el turno del Brooklyn Flea Market. Artículos vintage, muebles, antigüedades y artesanías, además de puestos de comida, son sólo algunos de los productos que se pueden encontrar.
Fulton Street: de compras por Brooklyn
Visitar Nueva York también es sinónimo de compras. La variedad de productos, tiendas y precios hace que hasta el más austero dedique al menos un día o unas horas de la estadía a esta actividad. Fulton Street es donde se concentran la mayoría de las grandes tiendas: H&M, GAP, Banana Republic, Macy's, entre otras tantas. A diferencia de Manhattan, los negocios no están tan atestados de gente, lo que se agradece al momento de entrar al probador o pagar, sin tener que hacer largas filas.
Si tantas compras no lo dejan exhausto nada como pasar por Junior’s (Flatbush Avenue Extension 389) en pleno Downtown de Brooklyn, a probar el mejor cheesecake de Nueva York -empíricamente comprobado-, un exquisito y cremoso manjar que se puede degustar en diferentes versiones: chocolate, frutilla, frutos rojos, arándanos, vainilla y las variedades siguen.
Abierto desde 1950 Junior’s es todo un clásico del distrito y se ha vuelto popular por ser visitado por políticos norteamericanos entre los que se destaca el presidente Barack Obama. Sin embargo, su verdadera fama se la debe a su cheesecake, que es toda una leyenda.
Dormir en Brooklyn
Brooklyn emerge cada vez más como una excelente opción para alojarse, cuando se visita Nueva York. Con precios más accesibles y la facilidad de movimiento que ofrece el transporte público para ir de un lado al otro, sumado a una oferta hotelera que se ha multiplicado, Brooklyn ha dejado de envidiar a la parte de la ciudad que se extiende del otro lado del East River y se ha potenciado como un polo cultural, gastronómico y turístico que merece la pena conocerse.
Ubicado en la avenida Flatbush Extension, a pocos metros del puente de Brooklyn y de DUMBO, además, de conectado estratégicamente con el metro, el Hotel Dazzler Brooklyn es una excelente opción para conocer este distrito así como también visitar Manhattan. Con una estética ecléctica que rememora tanto a la década de 1920 como al diseño actual más puntero, sus habitaciones y espacios comunes son una delicia.
La estadía incluye un completo desayuno donde se ofrecen variedad de frutas, yogures, pastelería y fiambres, ideales para comenzar el día con fuerzas para el recorrido. La buena predisposición del personal preparado para resolver dudas y ofrecer soluciones a los huéspedes, es otra de las cualidades a destacar en su servicio.
Información
Cómo llegar
A Nueva York. Aeroméxico ofrece vuelos desde Buenos Aires con escala en México. aeromexico.com/es/ar/
A DUMBO. Parada York St., línea F.
A Brooklyn Heights. Parada High St. -línea A y C-, parada Clark St. –línea 2 y 3-.
A Williamsburg. Parada Bedford St. –línea L-.
Dónde comer
Grimaldi's: Front St. 1.
www.grimaldis-pizza.com
Juliana's: Old Fulton St. 19.
www.julianaspizza.com
Shake Shak DUMBO: Old Fulton St. 1.
www.shakeshack.com
Berry Park Bar. Berry St. 4.
www.berryparkbk.com
Junior's. Flatbush Avenue Extension 389.
Qué hacer
Mercado Smogasburg. East River Waterfront, entre North 6 y North 7 St. y el East River.
www.smorgasburg.com
Brooklyn Flea Market.
brooklynflea.com
Dónde dormir
Dazzler Brooklyn Hotel. Flatbush Extension Avenue 85.
www.dazzlerbrooklyn.com