Invertimos miles de pesos en comprar un smartphone. No es nada económico en la actualidad y menos que menos en regiones con monedas devaluadas, como es nuestro caso. Al costo del aparato encima se suman los precios de los planes de datos y contratos con nuestro operador que debemos acatar al adquirir el teléfono.
Con toda plata puesta para el celular nos damos cuenta que necesitamos un cargador extra, ya sea porque se rompió el original o porque como muchas personas nos sirve llevar uno en el bolso para cuando estamos fuera y nos quedamos sin carga.
A todos nos pasa que al ir a un negocio vemos que los cargadores originales muchas veces duplican y hasta triplican el valor de un genérico. ¿Qué hago? El vendedor asegura que sirven y andan bien, pero ¿Puede dañar el equipo? ¿Son durables?