Último lugar que visitaste: Mar del Plata.
¿Qué no puede faltar en tu equipaje? Puedo prescindir de todo. Sólo necesito buenas zapatillas, cómodas para caminar.
¿Matás o te matan las horas en los aeropuertos? Me matan.
¿Ventanilla o pasillo? Ventanilla.
¿Qué es lo primero que hacés cuando llegás a un nuevo lugar? Trato de conseguir un mapa o de orientarme con el celular. Busco referencias. Es una obsesión.
Un sabor nuevo que hayas descubierto en un viaje: Moqueca pernambucana, en Brasil.
¿Cuáles son los requisitos para tus vacaciones ideales? Playa y shopping.
¿Cumplís con algún ritual personal cuando viajás? Ninguno.
¿Qué traés de tus viajes? Sabores. Me impactan mucho los sabores nuevos y vuelvo manija con esos recuerdos.
¿Qué es lo que más y lo que menos te gusta de la vida de hotel? Me vuelvo loco con una buena cama, con buenas sábanas. No me gusta no llegar a estar el tiempo suficiente para ordenar la ropa, siempre tengo todo desordenado.
Una ciudad del mundo en la que vivirías: Barcelona, porque tiene todo; playa, ciudad, arte, gastronomía, arquitectura. Todo.
Una ciudad para compras: Miami.
Un destino romántico: París.
Un sitio para visitar con amigos: Mi ciudad, General Alvear. Para mí, Alvear es amigos.
Un destino que te sorprendió: Santiago de Chile, es una ciudad monstruosa y no podía creer lo moderna, tecnológica, el parque automotor, lo limpia.
¿Y uno que te decepcionó? San Fernando del Valle de Catamarca, fui a laburar y no me gustó nada.
Un recuerdo de vacaciones: Un verano en Villa Gesell con mi familia. Cuando tenía 6 años me regalaron un metegol para Reyes.
El lugar al que siempre podrías volver: Barcelona.
Un destino pendiente: Bora Bora
Tu próximo viaje: Laguna del Diamante.
