Córdoba es una ciudad diversa. Histórica, intensa, tranquila, vibrante, joven y con pasado latente. La capital de la provincia despliega todos sus atractivos en pos de atraer a turistas para que no sólo la visiten de camino a sus famosas Sierras. Con una amplia oferta cultural, propuestas para conocer su historia, una gastronomía de excelente nivel y una animada vida nocturna, Córdoba se convierte en el plan perfecto de cualquier viajero.
Desde el décimo piso del hotel Sheraton, la ciudad pareciera no tener límites, las construcciones se suceden unas a otras en todas las direcciones. El lila de los florecidos jacarandaes ofrece una excelente postal de la urbe. Después de ese primer pantallazo panorámico, que ofrece una privilegiada perspectiva, toca caminar sus calles –porque es así como se descubren verdaderamente los entramados - y conocer las diferentes facetas que ponen de manifiesto sus barrios.
Religiosa e histórica
Visitar Córdoba es conocer más acerca del pasado de nuestro país. Fue aquí donde se fundó la primera universidad de la Argentina, en 1613, impulsada por el Obispo Trejo y razón por la cual la ciudad se jacta de responder también al apodo de La Docta.
Su estratégica posición geográfica la convertiría, durante la época colonial, en un valioso punto de encuentro en los caminos virreinales y con ella llegarían también diferentes órdenes religiosas que se ubicarían en la zona y que hoy se traducen en la cantidad de iglesias y campanarios que colman la ciudad.
Aunque -sin lugar a dudas- serían los jesuitas y su incansable labor, quienes dejarían los legados más importantes. Entre ellos, no sólo se encuentra la recién mencionada casa de estudios sino también la denominada Manzana Jesuítica, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2000.
Este histórico complejo comprende el Colegio Nacional de Monserrat, la antigua sede de la Universidad Nacional, la residencia y la iglesia de la Compañía de Jesús –fundada aquí en 1650- así como también la Capilla Doméstica, como se denomina a un pequeño templo que con su techo de cañas de tacuaras recubierto de cuero de vaca pintado a mano, es una verdadera joya arquitectónica.
Por aquí pasó el canonizado Cura Brochero, célebre jesuita cordobés, y aquí rezaba el Papa Francisco, en su paso por la provincia cuando todavía era el Padre Jorge Bergoglio, comenta Cuqui, la guía del recorrido turístico que organiza la Municipalidad de la ciudad.
Quienes quieran seguir sumergidos en la Córdoba colonial encontrarán en la animada Plaza San Martín otros exponentes de la época como la majestuosa Catedral que fue fundada en 1573 y el Cabildo que data del siglo XVII.
Un presente vibrante
Si la Manzana Jesuítica honra el pasado de la ciudad, hacia el sur los pujantes barrios de Nueva Córdoba y Güemes muestran el excitante presente. El primero famoso por ser el epicentro de la juventud que llega desde diferentes partes del país para estudiar en esta ciudad que es universitaria por excelencia. El resultado es una infinidad de bares que se traducen en una animada vida nocturna y prometen veladas eternas con el célebre fernet con cola por medio.
Mientras que Barrio Güemes – conocido como el San Telmo cordobés- es una cuidada puesta en escena, ideal para encandilar al viajero con sus vivos colores, su frescura y su aire de bohemia. La calle Achával Rodríguez concentra parte de las galerías que son todo un sello del distrito. Ahí lo artesanal se mezcla con lo moderno, dando sitio a locales con pulidos detalles donde proliferan las galerías de arte, las tiendas de antigüedades y los locales de ropa. Las ferias son otro de los atractivos como la del Paseo de las Artes o la de Plaza Güemes que ofrece artículos usados.
La Galería Barrio que antaño albergó unos depósitos de la policía cordobesa hoy deja al descubierto el potencial del distrito con locales de ropa de diseño y también comida. Los restaurantes proponen desde platos con pinceladas gourmet hasta la más clásica pizza o la internacional hamburguesa, que dice presente en la mayoría de los menúes.
Brunchería (Achával Rodríguez 244) se destaca por estar abierto desde la mañana a la noche algo que no todos los locales de la zona ostentan. Su carta es tan amplia como su horario desde opciones dulces para acompañar con un excelente café hasta sandwiches, ensaladas o cazuelas para el mediodía. Mientras que, la Cervecería Capitán, se anima cuando empieza a caer la tarde y ofrece un menú ibérico de tablas, tapas y, por supuesto, cerveza.
Aunque las propuestas de Güemes no se terminan aquí. Este barrio también presume de una animada vida cultural con música que colma sus calles los fines de semana. Ya sea en espectáculos callejeros o patios internos de las antiguas casonas que hoy albergan bares.
Casa de Pepino (Fructuoso Rivera 287) es el nombre que recibe un caserón que antaño fue un almacén de ramos generales del inmigrante italiano, José Tucci, y que, desde 2005, es un Centro Cultural que ofrece diversas actividades y exposiciones de arte ideal para ponerse en contacto con la actividad cultural que se cuece en las calles cordobesas.
Gastronomía
En la capital mediterránes no escatiman en propuestas y se asienta como un interesante polo gastronómico. Ejemplo de ello es Goulu "un almacén restaurante gourmet" como lo define su dueño, Gabriel quien hace ocho años se inició en este proyecto culinario intentando ofrecer algo diferente al público.
Ubicado en el Cerro Las Rosas, el restaurante posee una carta reducida aunque no por eso menos tentadora, sus platos se basan en recetas de diferentes regiones argentinas. Así la Pampa, la Puna o la Patagonia se hacen presente con sus sabores en originales propuestas que tienen toques de cocina de autor.
Existe la posibilidad de optar por un menú degustación, ideal para conocer los diferentes manjares de Goulu y la propuesta se completa con una vasta carta de vinos. El ambiente acogedor y la excelente atención son los ingredientes que se suman a la ecuación para hacer de cualquier noche una velada perfecta.
A pocos kilómetros las sierras
Con base en la urbe se pueden recorrer los principales atractivos situados a escasa distancia. Nono es uno de ellos, ubicado en Traslasierra, conocido por su tranquilidad y la belleza de los ríos que lo atraviesan, rodeado del majestuoso paisaje de las Altas Cumbres.
Entre los imperdibles el Museo Rocsen con su fachada custodiada por 49 esculturas es el punto de partida para una colección de más de 40 mil piezas divididas en las más variadas temáticas. Desde animales prehistóricos y rarezas naturales hasta elementos representativos de diversas y alejadas culturas del mundo. Entrada general: $ 65
El Laberinto de Nono es un paseo familiar para jugar e intentar llegar al centro, donde los espera una hermosa panorámica del valle. Entrada $ 45.
Granja El Aromo, ideal para pasar el día en contacto con la naturaleza y los animales. Además, se pueden realizar recorridos en cuatriciclos y cabalgatas. Entrada: $ 50 mayores, niños gratis. Criadero de truchas, ubicado en Las Calles, pegado a Nono.
Al ingreso se le entrega un mapa con diferentes recorridos para visitar todo el lugar. Pueden verse los piletones desde muy cerca, también una huerta orgánica, y la posibilidad de pescar y comprar tu propia trucha. Entrada gratuita con una compra/consumición obligatoria.
Alquiler de caballos y bicicletas. Costo entre $ 60 y $ 80 respectivamente.
Licorería artesanal. Es una casa ubicada en Las Calles, a 8km del centro de Nono, que brinda degustación gratuita de alrededor de 20 clases distintas de licores. En el mismo predio funciona una casa de té, con elaboración de masas con especialidad en frutos rojos como frutillas y arándanos, alfajores y dulces caseros.
Feria de artesanías en la plaza. Trabajos locales de hilados, talabartería y soguería entre otros estarán todo el verano deleitando a los viajeros. Además se realizará el Encuentro de Artesanía Ancestral, el de Soguería y Talabartería: viernes 8 al jueves 14 de enero. Tejidos e hilado: viernes 15 al jueves 21 de enero. Cerámica negra: domingo 24 al 31 de enero. Platería criolla: del 8 al 14 de febrero.
Por otra parte todos los días de enero y febrero desde las 21 hasta la 1 habrá música en vivo y animación.
Fiesta de las carrozas. Será el 23 de enero, allí son los turistas son quienes hacen las carrozas y desfilan alrededor de la Plaza, mientras el municipio aporta para la compra de los materiales.
Más información: www.nonoturismo.gob.ar