Un buen estado físico (bueno, al menos aceptable), paciencia y muchas ganas de disfrutar de los paisajes en silencio y despacio. El cicloturismo va ganando adeptos en todo el mundo, y la Argentina ofrece grandes atractivos para los amantes de las dos ruedas, de todos los niveles de dificultad. Aquí te proponemos 8 recorridos con un grado de exigencia medio, como para que te vayas entrenando pero sin exagerar, que no se trata de dar la vuelta al mundo. Buenas bicis, repuestos, alforjas con carpa, ropa, agua y comida, y... ¡a disfrutar!
Ruta de los 7 Lagos. Todo un clásico, es el viaje perfecto para iniciarse en el cicloturismo. ¿Por qué? Porque no es largo (108 km en total), está preparado para recibir a ciclistas (hay proveedurías, hosterías, campings organizados y en temporada también libres) y ahora está totalmente asfaltado.
Además, un “pequeño” detalle: es una de las rutas más lindas del país. Se puede hacer partiendo de Villa La Angostura o de San Martín de los Andes, aunque suele recomendarse de sur a norte, porque hay menos subidas. El caso es que atraviesa los parques nacionales Nahuel Huapi y Lanín y permite conocer de cerca los lagos Espejo, Correntoso, Villarino, Falkner, Hermoso, Machónico y Lácar. Además, recorrer un tramo de la célebre Ruta Nacional 40.
Cruce de los Andes. Otro clásico para los amantes del mountain bike, con varias opciones. Pero para un intermedio no tan exigente, una buena opción es partir de San Martín de los Andes por la ruta 46 hasta el paso Hua Hum, bordeando los lagos Lácar y Nonthue por el norte. Del lado chileno, la ruta termina en Puerto Pirehueico, a orillas del lago del mismo nombre.
Desde allí se puede optar por regresar por el mismo camino (110 km ida y vuelta) o tomar la barcaza que navega una hora y media por el lago hasta Puerto Fuy, donde se puede retomar el pedal durante 57 km por las rutas chilenas 203, T-29 y 201, entre bosques, lagos y montañas, para regresar a la Argentina por el paso Carirriñe, a 87 km de San Martín de los Andes. Hay bastante ripio y este paso se cierra con malas condiciones climáticas.
Parque Nacional Los Alerces. Si se hace entre Esquel y El Bolsón, pasando por Trevelin, suma 203 kilómetros con tramos de asfalto y ripio y, además de Los Alerces, pasa también por el Parque Nacional Lago Puelo y los pueblos de Trevelin, Villa Rivadavia, Cholila, Epuyén, El Hoyo y Lago Puelo, por lo que no faltan campings, proveedurías y servicios.
En pocos sitios podrás disfrutar de la naturaleza como en este recorrido por bosques, lagos, lagunas, cascadas, valles y hasta una parte de semi estepa patagónica, que se puede hacer tranquilo en una semana (pedaleando un promedio de 30 km por día). Los meses ideales son noviembre-diciembre y de mediados de febrero a abril. En verano las rutas están muy transitadas y los campings suelen estar a tope.
San Luis. Las sierras puntanas y cordobesas sin dudas invitan a disfrutarlas en bici. En San Luis, una de las provincias más ciclistas de la Argentina, un recorrido posible, de 210 km, comienza y finaliza en Potrero de los Funes: por la ruta 9 hacia el norte hasta San Francisco del Monte de Oro (pasando por Trapiche y La Carolina), para luego tomar una ruta secundaria al noroeste hasta la ruta 3 y allí hacia el sur por la ladera opuesta de la sierra, para pasar por Hipólito Yrigoyen, Villa de la Quebrada y Suyuque Viejo y, un poco más al sur, cortar por el Camino al Mirador, que al otro lado de la sierra desciende hasta Los Pinos, pegadito a Potrero de los Funes.
Ruta 40 sur: Santa Cruz. También un clásico entre los ciclistas que buscan soledad y épica. El trayecto ideal sería desde la ciudad de Perito Moreno hacia el sur, hasta El Calafate. La mayor parte de la ruta está asfaltada, lo que le quitó épica pero le sumó comodidad. Además, es un trecho largo (624 km), por lo que no es para cualquiera. Una opción más accesible hacer un tramo, desde El Calafate hasta El Chaltén, por las rutas 40 y 23.
Son 213 km de asfalto por ese límite donde la Cordillera se va haciendo estepa. No hay servicios pero sí un paisaje imponente y solitario durante 105 km, de El Calafate a La Leona. Luego, al tomar la ruta 23 hacia el oeste se empiezan a ver, cada vez más cerca, las siluetas de los cerros Fitz Roy y Torre. Desde El Chaltén vale seguir 36 km al norte y conocer Laguna del Desierto. El gran problema de esta ruta puede ser el viento, que suele soplar fuerte desde el oeste.
Ruta 40 norte: Valles Calchaquíes. De Cafayate a Salta capital hay dos recorridos posibles, ambos espectaculares. El primero es por la ruta 68 (poco menos de 200 km), todo por asfalto, atravesando la Quebrada de las Conchas, de impresionantes colores y formaciones naturales. El otro es más espectacular pero también bastante más exigente: la ruta 40 hacia el norte, con los primeros 30 km (Cafayate a San Carlos) de asfalto pero luego ripio y en algunas partes arena, lo que te obligará seguramente a caminar en algunos tramos.
Pero los paisajes y pueblos son extraordinarios: la Quebrada de las Flechas, Angastaco, Molinos, Seclantás y Cachi. Allí retorna el asfalto por la recta de Tintin, que atraviesa el Parque Nacional Los Cardones hasta Piedra del Molino, a 3.348 m.s.n.m.. Y luego, todo bajada; primero el gran zigzag de la Cuesta del Obispo, donde se pasa de los ocres de la montaña al verde intenso de la vegetación, para salir a la ruta 68 en El Carril, a 36 km del centro de Salta. En total son poco más de 300 km.
Quebrada de Humahuaca. No todos los días se tiene la oportunidad de disfrutar a pedal de un sitio declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco. Los cerros, los pueblos, el río, la gastronomía, todo es espectacular. Lo único con lo que hay que cuidarse es con la altura. Son 170 km entre Volcán, en el sur, y Abra Pampa en el norte. Pero la opción más sencilla es hacerlo al revés: de norte a sur, porque es en bajada, con lo que vas a pedalear poco (aunque conviene estar al menos un par de días en la altura antes de partir).
¿Paradas obligatorias? Humahuaca (podés aprovechar un desvío y hacer el espectacular camino a Iruya, 73 km con cuestas importantes), Huacalera, Uquía (imperdibles los cuadros de los Ángeles Arcabuceros en su iglesia), Tilcara, Maimará, Purmamarca (al pie del Cerro de los Siete Colores), Tumbaya y Volcán. Por el camino, desvíos varios para ver, escuchar y saborear todo.
Misiones. Una provincia fantástica para pedalear. Si se puede evitar el verano, por las temperaturas, un excelente recorrido parte de Apóstoles, en el centro de la provincia, y llega hasta Puerto Iguazú yendo por la ruta nacional 14 hasta Bernardo de Irigoyen, en el límite con Brasil, y luego la 101 hacia el Noreste.
Esta ruta permite disfrutar de algunos de los mejores paisajes de la provincia de la tierra colorada evitando la ruta 12, que suele tener mucho tránsito que va y viene de Puerto Iguazú. La 14 tiene tránsito pero buenas banquinas, y la 101 hasta Caburéí tiene poco tránsito. Yerbatales, selva, caminos colorados y sinuosos, sierras, ríos y cascadas garantizan un gran recorrido.