Labios: oscuros, fucsias, morados, e incluso negros. El color rojo sigue presente. Labios mates.
Cejas: han recuperado protagonismo en el rostro engrosándolas y rellenándolas e incluso despeinadas, desordenadas. El negro sigue siendo el favorito.
Pestañas: si nunca te has atrevido a colocarte pestañas postizas, ahora es tu oportunidad. Son muy cómodas y hacen el efecto lifting en el ojo. Negro es el fuerte, pero para las más osadas los colores fuertes y los gliters están permitidos.
Maquillaje invisible: ya no se usa el maquillaje que tipo máscara. Está de moda el "NO MAKE UP". Una crema ligera, eso sí, bien puesta o algún "primer" corrector, pero muy ligero y sutil.
Eye Liner marcado: muy negro con aires felinos, lo podés alternar con lápiz morado y verde oscuro.
Strobbing: es el iluminador. ¡No te puede faltar! Ilumina los puntos de luz donde impactan. Te aconsejo tonos perlados para el día y dorados para la noche.
Sombras con brillo: sacá tu paleta de maquillaje y seguro que encuentras tonos nacarados y metálicos, pero un toque sutil en la zona del lagrimal. Olvidate de los marrones y grises.