Cualquier desarrollador entiende que es imposible conformar a todos los usuarios. Siempre va a haber muchas personas que cuestionarán la forma en que funcionan los dispositivos, las apps y casi cualquier herramienta tecno.
Pero a la complejidad que significa el desarrollo de un producto se le suma la falta de conocimiento técnico por parte de quienes lo utilizarán, lo que a veces puede prestarse a un cataclismo de confusión.
Algo de esto está pasando desde que miles de usuarios argentinos reportaron que en WhatsApp ven un emoji que representa a la bandera de Reino Unido para las Islas Malvinas, pero pocos advierten que la app de mensajería no es la responsable del símbolo en sus teclados. ¿Qué está pasando?