En Instagram, Alejandra Maglietti es una de las mujeres del espectáculo que más se anima a mostrar. Aunque no tiene un perfil en plataformas sin censura como DivasPlay o OnlyFans, la periodista decide mostrarse sensual para sus millones de seguidores.
Cada vez que puede, comparte looks atrevidos y fotos en ropa interior o en bikini, las que se quedan con todos los “likes”.
Tal como ocurrió con uno de sus últimos posteos, en el que la panelista de BenditaTV posó de rodillas con una bikini verde de tiritas, una de las poses preferidas de la abogada, que resaltó su delantera.
Las fotos de Maglietti les recordaron a sus seguidores la novela “Pasión de Gavilanes”, ya que la modelo le sumó un sombrero a su producción, muy similar al que usaban las protagonistas.
En cuestión de algunas horas, la periodista sumó más de 21.500 “me gustas”y no tardaron en llegarle las notificaciones de los comentarios que le dejaron al pie de sus fotos.
“Estás muy fuerte”, “Apaaaaaaaaa me desmayé por tanta hermosura”, “Qué bella lorita!”, “Espectacular Ale, una maravilla de mujer”, “Justo hoy, en el día de la Mujer, qué mujer!!!”,”Belleza natural, la mejor belleza”, “Siempre diosa”, fueron algunos de los mensajes de los usuarios.
Alejandra Maglietti encantó con un top que su delantera fue protagonista
Más allá de mantenerse ocupada con su trabajo en las leyes, la también panelista, sabe usar las redes sociales en su beneficio y sobre todo, para sorprender a sus fanáticos y seguidores.
Esta vez, se mostró con un atuendo deportivo que enloqueció a los internautas, reafirmando que lo hecho en el Carnaval de Gualeguaychú y Mendoza, no es en vano.
Dueña de una figura envidiable, Alejandra Maglietti suele cuidar su silueta con intensos entrenamientos y visitas al gimnasio como comparte en sus redes.
En primer plano, Alejandra dejó a la vista su delantera y un escote, enamorando a sus seguidores. “Tamo activo”, escribió en la postal.
La abogada aplicó un llamativo maquillaje con colores oscuros en los ojos, que le permitió realzar su mirada y darle profundidad a la mirada, siendo el más preponderante, y un sutil rubor rosado sobre los pómulos.