La noche en las cocinas más vistas comenzaba con un desafío que finalmente parecía satisfacer a Alex Caniggia. Los participantes de MasterChef Celebrity 2 recibieron a los tres jurados vestidos de pilotos y eran desafiados a preparar comida de avión. Una ensalada con pasta y un plato principal eran las instrucciones para satisfacer a los comensales en el aire. Caniggia se puso manos a la obra: “First class obvio, al gallinero no”.
Con un extravagante look parado al estilo de Los Simpson, el mediático comenzó su menú, que incluía una ensalada de pastas con tomates cherry, queso brie y aceitunas negras y un pollo caramelizado con verduras salteadas. Su performance quedó completa cuando en el momento justo en que Damián Betular se acercaba a darle indicaciones, una llamarada se disparó del pollo en la sartén. “¡Magia! ¡Uhhh! Rock and roll”, dijo emocionado haciendo miles de caras. “¡Cómo controlo ese fuego!”, se dijo animado.
Sorpresivo final para Alex Caniggia
Todo parecía apuntar a que sería su noche, incluso en el momento de la evaluación, las devoluciones eran muy positivas. “Creo que es espectacular”, le anticipó al jurado. “Es genial que no sepas como se llaman pero que las cocines bien, es como el eslabón perdido, un enigma. Todos los vegetales están bien cortados, bien dorados y puestos de una manera armónica en el plato”, le debió reconocer Betular, junto con la aprobación de los otros dos jueces.
Alex ya veía en su pecho la medalla de oro, que corresponde entregarse el miércoles. Pero cuando los jurados se la ofrecieron a Daniel Aráoz y la de plata al mediático, su bronca estalló. ¿Qué pasó, Alex? ¿No te gustó? ¡Esperabas la de oro?”, le preguntó Santiago Del Moro. “Si querés la de oro, hermano, la próxima semana hay que esforzarse un poquito más”, le tiró Aráoz, pero el mediático contestó en el backstage: “La segunda metétela en el culo, la segunda no la quiero. Quedé recaliente”.