Luego del decreto de la cuarentena obligatoria muchos actores y actrices dejaron de trabajar y la situación económica complicó sus vidas. Por esta realidad muchas figuras se vieron en la necesidad de adaptarse a la situación y usar las nuevas tecnologías a su favor.
Con un perfil bajo, Cecilia Dopazo hace tiempo dejó la actuación para acompañar a sus hijos en los primeros años, pero luego más segura de sí misma regresó a las tablas y en medio de la pandemia por el coronavirus está reflexiva y más entregada a su profesión que nunca.
Junto a Julieta Díaz, Carmela Rivero y Natalia Grinberg, Cecilia Dopazo dirige la obra “Un virtual engaño” todos los fines de semana de agosto y en ella se habla un poco de la situación de encierro e incertidumbre que todos estamos atravesando.
Comprometida con el reclamo de todos los artistas por la falta de trabajo, Dopazo en muy activa en sus redes sociales y reclama la atención que el sector necesita para volver a trabajar, protocolos de por medio, y salir de esta complicada situación.
En 2019 regresó a la actuación y en una entrevista con “Teleshow” comentó: “Hacía muchos años que trabajaba y se empezaba a transformar en una inercia. No me daba tanto placer. Quise poner la energía más en lo doméstico, en mis hijos; y también en lo personal, estudiando otras cosas”, comentó la actriz acerca de su alejamiento del medio.
Luego agregó: “Volví de unas vacaciones con muchas ganas de trabajar después de un impasse. Fui a ver a mi representante y le dije: ‘Quiero de nuevo, quiero estar adentro’. A los tres días ya estaba en el teatro”, comentó Cecilia que volvió “al ruedo” con la obra “Falladas” de José María Muscari.
Actualmente aislada y con muchas ganas de trabajar, Cecilia estudia y se capacita para que la vuelta a las tablas sea más plena que nunca.
