Luego de ser diagnosticado con coronavirus la semana pasada, Coco Sily recibió el alta médica a fin de seguir el tratamiento en su casa y lo comunicó a través de sus redes sociales.
Luego de algunos días en el sanatorio de Los Arcos, el actor se refirió a su salud y contó además, que recibió un llamado del presidente Alberto Fernández de quien es amigo hace años.
El cómico comentó que se acercó al centro de salud porque tenía un fuerte dolor abdominal y nunca se imaginó que estaba infectado de coronavirus, pero luego del positivo y como no presentaba síntomas Sily se fue a su casa en donde pasará unos días mientras se recupera.
En medio de la internación, el autor de “La Cátedra del Macho” relató en C5N que lo llamó el Presidente de la Nación para saber cómo estaba: “Por suerte lo de los divertículos con antibióticos y con calmantes se fue mejorando. Y lo del coronavirus no presentaba otros síntomas, no tuve fiebre y no tuve tos gracias a Dios. Así que me dieron el alta, ya sintiéndome mejor de los divertículos. Estoy cursando el coronavirus, pero no puedo saber desde cuándo lo tengo. Se toma simbólicamente el día del hisopado. La diverticulitis (inflamación de los diverículos) no se sabe si fue por el coronavirus o fue casual. El diagnóstico me sorprendió enormemente porque yo fui por un dolor abdominal”, explicó Sily y agregó: “Ahora estoy haciendo una cuarentena bastante controlada. Fue algo casual cómo lo encontraron”.
Luego se refirió al llamado de Fernández: “El presidente tuvo la gentileza de llamarme por teléfono, cosa que le voy a agradecer enormemente por una cuestión de relación de muchos años con él. Fue una conversación personal muy cariñosa. Me llamó y me dijo ‘cómo estás Choquito, cómo te sentís, precisas algo”, contó relajado.
Sobre sus días en Los Arcos el actor recordó: “Estaba totalmente aislado, se llama ‘burbuja’ la habitación. Cuando te tienen que traer algo, te golpean, tenés que contar hasta diez, salir a buscar, pero muchas veces vienen y tienen contacto directo con vos todo el tiempo”, agregó sobre los cuidados que tomaba el personal de salud. “Entonces digo, si ellos se enferman, y la cama la ocupa uno de los imbéciles que fue ahí a gritar, porque yo no estoy hablando de los trabajadores que están reclamando, porque a ellos los comprendo y los entiendo y los acompaño y los apoyo”, concluyó.