No hay dudas de que la factoría de Cris Morena ha impulsado la carrera artística de decenas de actrices y actores argentinos, como Agustina Cherri, Luciano Castro, Lali Espósito, Luisana Lopilato, Peter Lanzani y la China Suárez, entre otros.
Y a pesar de que quienes fueron tocados por la “varita mágica” de la exitosa productora han disfrutado de muchos beneficios por sus trabajos en programas como Jugate conmigo, Chiquititas, Floricienta, Rebelde Way, Rincón de Luz y Aliados, también han padecido las exigencias trabajar desde tan temprana edad.
Sin ir más lejos, hace unos días Lanzani reveló en diálogo con Jey Mammon que pensó bajarse de la segunda temporada de Casi Ángeles. “Justo me agarró en quinto año de colegio, lo estaba haciendo alejado de mis amigos, viajes con el club (de rugby en el que jugaba), sentía que estaba perdiendo algo de pertenencia mío”, reveló y aseguró que Nico Vázquez lo convenció de seguir.
Por otra parte, Candela Vetrano señaló que fue muy buena su experiencia junto a Cris, pero al igual que muchos colegas tuvo que hacer mucha terapia por haber empezado su carrera en los medios durante su niñez. Mientras que Tomás Fonzi, que formó parte del elenco de Verano del ‘98, remarcó que la productora siempre fue muy disciplinada y exigente y que a veces el trabajo resultaba abrumador.
Una de las chicas que se llevó la peor parte de la fama fue Angie Balbiani, quien en Rebelde Way y en Floricienta interpretó a “la gordita” del elenco, motivo por el que fue víctima de bullying tanto por sus compañeros como por los televidentes.
Cris Morena versus Jey Mammon
Y cuando Cris estuvo en el ojo de la tormenta por haberle dicho a Jey Mammon que debía bajar de peso si quería trabajar con ella, fue muy crítica con la productora. “Me parece que ella es de una generación en la que siempre el tema de estar flaco es un beneficio”, expuso en una entrevista en Intrusos.
“Le podemos caer a Cris, pero no es ella la persona. Representa a toda una generación ese tipo de pensamientos. Yo tenía 21 años cuando empecé a trabajar y nunca la escuché decirlo en voz alta, pero de vuelta no le quiero caer a Cris porque yo tuve la suerte de tener unos kilos de más y hacer Rebelde Way”, agregó.
Así como la delgadez y los estereotipos de belleza que replicaban sus creaciones, también fue muy criticada la forma en la que la exmujer de Gustavo Yankelevich representaba el amor en los adolescentes. Ya que siempre mostró parejas tradiciones, a veces con relaciones tóxicas que estaban completamente “aceptadas” y poca diversidad.
Pero a pesar de todos estos cuestionamientos, quienes fueron descubiertos por Cris destacan que trabajar en proyectos tan importantes les dio herramientas fundamentales para seguir abriéndose camino en la actuación con responsabilidad y profesionalismo. ¿Una de cal y una de arena?
