Después de varias idas y vueltas, reuniones que no tenían un fin claro y dedicatorias en redes sociales, finalmente Wanda Nara y Mauro Icardi confirmaron su reconciliación. Él vino desde Turquía exclusivamente junto a sus hijas para acompañar a la hermana de Zaira los primeros programas de MasterChef, que marcaron su debut como conductora en la televisión argentina.
El jugador le regaló a Wanda un lujoso reloj valuado en más de 20 mil dólares y varias joyas que la empresaria enseñó desde su cuenta de Instagram. Eso sí, ella no piensa irse de Argentina al menos hasta mitad de año para priorizar su carrera.
Con esta noticia y el reciente debut en las pantallas argentinas, la semana de Wanda Nara no puede marchar mejor y qué mejor manera de disfrutarlo con quien uno quiere. Terminando los días de trabajo, los padres de Francesca e Isabella compartieron la boda de Lizy Tagliani.
Para la ocasión, Wanda llevó un maxivestido color negro con mangas largas y detalle cut out, que eligió combinar con un clutch de cuero Birkin de Hermès, una pieza muy exclusiva de una firma francesa de la que la empresaria es fanática.
Por otro lado, la conductora de Telefe tenía el pelo suelto visiblemente un poco más corto y más claro en sus puntas. En cuanto a maquillaje llevó un delineado negro y labios en color nude. Esto no fue todo y coloreó sus uñas con un clásico tono de rojo que se distinguía con su look total black.
Una vez más Wanda Nara dejó claro que en el sencillo y tradicional esta lo glamoroso. Usar un look total black no es para cualquiera y menos con la delicadeza que ella lo hace. Un color que será protagonista absoluto y que volvió de la mano de la Generación Z que le dio los tintes que le estaba faltando.