Algo sucedió con Miley Cyrus porque de un día al otro decidió vender su mansión de California que compró hace un año atrás y que su madre había remodelado con mucho amor y dedicación. El misterio está presente en esta transacción ya que se desconoce el motivo y la identidad del comprador.
La artista internacional compró la propiedad en el verano del 2020 por 4.9 millones de dólares y ahora la vendió por 7.2 millones. Lo cierto es que la venta llegó de forma repentina y que en muy pocas ocasiones, Miley la mostró en las redes sociales.
La casa impresionante está ubicada en el lujoso barrio de Hidden Hills, en el que también viven otros famosos de la talla de las Kardashians, por lo que se cree que el nuevo dueño de mansión es alguien reconocido y por ese motivo desea mantener su identidad secreta y protegida por un fideicomiso con sede en Missouri.
Lo cierto es que con la vivienda se fueron algunos recuerdos familiares y hasta los detalles estéticos y decorativos que le imprimió Tish Cyrus, la mamá de Miley. Los toques personales en las paredes y objetos grita a los cuatro vientos el nombre de la joven.
“Es muy boho chic. En mi propia casa me gusta todo lo neutro pero con Miley, tiene que sentirse rock and roll. Hay mucho color”, reveló la mujer que imprimió un estilo único en la vivienda de seis habitaciones, siete baños y que ocupa 500 metros cuadrados.
Una estantería, una silla con forma de boca que literalmente mueve la lengua y un tratamiento psicodélico en el techo del artista Brian Robles son solo algunos ejemplos de la genialidad caleidoscópica de la mansión.
Si algo en la vida aprendió Miley es el no apegarse a lo material y es que sufrió una gran pérdida cuando se incendió su hogar de Malibú, el que compartía con su ex marido Liam Hemsworth.