Soledad Pastorutti es una de las más queridas y exitosas cantantes del país. Actualmente, la cantante se desempeña como jurado en “La Voz Argentina” (Telefe) y se convierte en la favorita de los participantes que aman el folclore y la música popular.
Un insólito episodio sucedió en la última emisión del programa, cuando Joaquín Molina, oriundo de Santa Fe, se presentó en el escenario para cantar “Carpas de Salta”. Si bien el jurado le entregó elogios, la interpretación del joven no fue suficiente, ningún coach dio vuelta su silla y así quedó eliminado en la etapa de audiciones a ciegas.
La sorpresa vino cuando Joaquín habló con los integrantes del jurado, en especial con La Sole. “Crecí con el folclore. Tengo una anécdota con vos”.
“Contala”, se animó a contestarle la artista, desatando las risas de su compañera Lali Espósito. “Pero no con vos, más con tu marido”, aclaró rápidamente el aspirante.
“Si no recuerdo mal, en Cosquín de 2002, entré eufórico porque estaba La Sole cantando. Era chiquito. Había ido a tocar a un par de peñas. Te había escrito una carta, me la recibió tu marido”, contó el joven.
“Para mí te vio esos ojos y dijo ‘no le doy la carta de este chico’”, respondió en tono de broma la intérprete de “Tren del cielo”.
Joaquín reveló el final feliz de su anécdota: “A fin de año la cosa es que me llegó una respuesta y una foto tuya y de tu hermana diciendo ‘nuestra música te acompaña a donde vayas’”.
Después de los aplausos, la jurado rememoró que, en aquella época, era muy común leer y contestar cartas de los fanáticos.
“Antes de la virtualidad lo hacíamos así con toda la gente que nos seguía y nos mandaba cosas muy lindas. Te quiero agradecer que hayas traído el folclore al programa. Mi preocupación es que la música que nos representa a los argentinos esté siempre vigente”, afirmó Soledad.
Jeremías Audoglio, el marido de La Sole
Jeremías y Soledad se conocen desde adolescentes, cuando se pusieron de novios. Después de varios años juntos, tanto en lo personal como en lo laboral, ambos se casaron hace 14 años y luegos se convirtieron en padres de las pequeñas Antonia (11) y Regina (8).
“Lo conocí cuando terminé el secundario en la nocturna de Arequito, por los horarios que me empezó a demandar la profesión. Cuando me instalé más en Buenos Aires, él se vino conmigo”, reveló Pastorutti tiempo atrás.