Julieta Poggio ha forjado una base sólida de seguidores en las redes sociales. A sus 21 años, se ha convertido en una de las figuras más queridas del público y llegó hasta la final de Gran Hermano, quedándose con el tercer puesto de la competencia.
Desde su paso por la casa más famosa del país, Julieta ha continuado construyendo su fama y comparte con sus miles de seguidores fotos de su vida cotidiana y sus elegantes looks.
Recientemente, la exhermanita sorprendió a sus fanáticos al lucir un extravagante atuendo que rinde homenaje a la infancia. En una de sus últimas publicaciones, Julieta se mostró con un outfit compuesto por un top y una falda corta adornada con tachas y brillo, botas texanas y un dibujo de Hello Kitty.
Esta elección de vestuario demostró una vez más la versatilidad y estilo de la joven, quien supo combinar elementos de moda de manera única y llamativa.
¿Bótox sí o bótox no?: la pelea de Julieta Poggio y La Tora
No obstante, Julieta Poggio también ha estado involucrada recientemente en una polémica en Twitter que la tuvo como protagonista junto a La Tora Villar. Ambas forman parte del programa de streaming “Fuera de Joda” desde que salieron del reality y están viviendo el mejor momento de sus carreras mediáticas.
La controversia surgió durante una transmisión en vivo del programa, cuando La Tora hizo un comentario sobre belleza que generó rechazo en las redes sociales.
Mientras hablaba sobre los tratamientos estéticos que se realiza, La Tora mencionó: “El viernes fui de mi doctora y le dije ‘volveme cinco años más joven, por favor’. Y me clavé ampollita en los labios, botox y profiling”.
Ante estos comentarios, Julieta Poggio expresó su deseo de no envejecer, a lo que La Tora respondió: “Vos tenés para arrancar baby botox”. Esta afirmación generó críticas en las redes sociales, ya que se percibió como una promoción de los estereotipos de belleza y como un estímulo a las personas jóvenes para someterse a tratamientos de botox.
La controversia resalta la importancia de un diálogo abierto sobre los estándares de belleza y la presión social en la industria del entretenimiento, recordándonos que la belleza y la confianza en uno mismo no deben depender de la edad ni de los tratamientos estéticos.