La socialité y empresaria Khloe Kardashian se posicionó nuevamente en el ojo público tras unas fotografías que la tenían mostrando una cicatriz que preocupó a sus seguidores.
Khloé Kardashian, reveló que le extirparon un melanoma de la cara, por lo que recientemente se le vio con una cicatriz de unos cuatro centímetros en el rostro, así como con vendajes del lado izquierdo.
La menor del clan Kardashian buscó dar tranquilidad y con el correr de los días esa marquita desapareció, sea por naturaleza o por maquillaje.
En lo corporal, Khlóe también ha sido muy cuestionada, incluso siendo tildada como la más gorda de sus hermanas. Algo que la puso en vela, hasta que logro reponerse y ejercitar su cuerpo para que los haters se arrepientan.
Hace tiempo que la modelo de 38 años, aprendió que lo más importante a la hora de transformar tu cuerpo es hacerlo por uno mismo y ahora se ha puesto como meta en sus redes sociales transmitir ese mensaje.
En abril de 2018, Khlóe fue madre de True, y admitió que, tras tomarse un tiempo de descanso, decidió volver a hacer ejercicio para desprenderse de los kilos que había ganado durante el embarazo, priorizando la alimentación y las rutinas de gimnasio.
Si bien la vida fitness le preocupa, desde el confinamiento de la pandemia, Khloé ha admitido que no está al tanto de lo que come. “pero eso no significa que esté comiendo bolsas de patatas fritas todo el día”, aclaró.
“Prefiero poner más esfuerzo en el gimnasio que en la cocina”. Por eso, lo que no ha dejado de hacer es mantenerse activa y en su último posteo de Instagram lo dejó claro.
Desde el Gym con calzas rosa, Khlóe entrenó duro
Con un look totalmente rosa chicle, conformado por un top, unas calzas y zapatillas, Khlóe se preparó para sus jornadas de entrenamientos.
En sus stories, donde encantó a sus más de 305 mil seguidores, Khlóe dio la espalda dejando al avista su parte trasera que es uno de sus principales atributos.