Fernanda Vives es una feliz mamá de una niña y un niño y durante la cuarentena hizo de todo para que ellos se divirtieran y no sufrieran tanto el aislamiento. En una oportunidad, ideó un «falso» restaurante en el que su familia era clienta y su papá, el periodista Rogelio Widmer, era el mozo.
Y ahora, Brisa, su hija de 9 años se divirtió a costa de su abuelo. Y es que la pequeña ama el mundo del maquillaje y dedicó tiempo de su domingo para dejar más bello al papá de su mamá.
Fue la misma Fernanda quien compartió en su cuenta de Instagram varias postales del nuevo look de Rogelio y de ella misma, tras quedar en manos de la niña. “Día de maquillajes con el abuelo”, escribió.
Al juzgar por publicaciones en el perfil de Brisa y de Fernanda, la pequeña toma clases de maquillaje y tiene pasión por dicho mundo.