Paramount Plus lanzó el nuevo documental de Marley y Mirko hace apenas algunos días y ya da de qué hablar. La dupla más querida por los argentinos llegó al servicio de streaming Premium de ViacomCBS contando su historia en primera persona.
Con las puertas abiertas a sus vidas, la dupla comparte los momentos más íntimos y únicos de la familia con su público. Entre ellos, uno de los momentos más sorprendentes de Mirko fue compartido por el conductor durante uno de los recientes capítulos de la serie documental.
En una charla con Florencia Peña, su tan allegada amiga, Alejandro contó una insólita confesión que su hijo de cuatro años le hizo: dijo que suele ver y hablar con su abuelo muerto.
Según narró Marley, todo comenzó un día en el que el pequeño vio una foto de su abuelo, a quien no llegó a conocer con vida, y le preguntó a su papá quién era la persona de aquella foto. Marley le contó que era su papá pero que ya había muerto.
Mientras narraba la historia a su amiga, el conductor aclaró que su padre falleció hace una década. “Más tarde, cuando lo acosté para dormir, cerró los ojos y me dijo: ‘Papá, cuando cierro los ojos veo angelitos y lo veo a tu papá’. Yo me quedé flasheado”, le contó a la conductora de Flor de equipo.
Ambos sorprendidos, continuaron la conversación cuando el conductor de Por el Mundo dijo que a los pocos días se sorprendió al ver a Mirko hablando por teléfono con su abuelo: “Estábamos en la casa de mi vieja y se puso como a hablar por teléfono. Dijo: ‘Hola, abuelo’. Le pregunté dónde estaba y me dijo ‘ahí’ y señaló el sillón donde siempre se sentaba en la casa de mi vieja, como que estaba ahí en ese momento”.
“Mirko es muy parecido a mi papá, capaz que hay una conexión ahí”, concluyó Marley intentando entender la experiencia que atraviesa su hijo.
Luego, Florencia afirmó que había contactado a una médium para comunicarse con su papá, quien murió en abril de 2020, tras luchar contra un cáncer terminal.
En una sesión, la vidente le comunicó un mensaje de Julio a Norma, su esposa: “Fue muy fuerte. Le dijo que cuando ella esté triste agarre la manta roja con la cual lo tapaba en sus últimos días. Además, mi papá le pidió a mi mamá que sacara sus cenizas de su cuarto porque tenía que soltarlo y que las lleve al lago San Roque (Córdoba), donde solían andar en bicicleta juntos. Ahora cuando podamos lo vamos a llevar ahí”.
