Máxima Zorreguieta, el Príncipe Guillermo y sus tres hijas viven rodeados de lujo y excentricidad. Al menos eso vemos en las fotografías de su renovado palacio, el cual estuvo en obra durante tres años. En enero de 2019, los reyes de los Países Bajos dejaron Villa Eikenhorst y se instalaron en su residencia oficial, el palacio Huis Ten Bosch, el cual tiene ahora el ADN de la argentina impreso en su estilo.
La remodelación costó 63 millones de euros y tardó bastante tiempo ya que fue construido en 1645 por pedido de la reina Isabel de Bohemia. Sus ambientes fueron cambiados conservados aunque se redecoraron con estilos modernos como por ejemplo el vestíbulo que, en lugar de una araña imponente, tiene una escultural luminaria de luces LED, realizada por Studio Drift.
El Salón del ADN se hizo a pedido de la mujer argentina. Se llamaba Salón Verde porque una seda de ese color cubría las paredes pero ahora luce de otro modo gracias a la intervención del artista holandés Jacob van der Beugel. Se mantuvo el mobiliario original y se respetó el deseo de que llevara la secuencia del ADN de los reyes. ¿Cómo? 60 mil piedras chiquitas amarillas conforman su huella genética, una obra de la que también participó el genetista holandés Hans Clevers.
El Salón Azul fue intervenido por Maurice Scheltens y Liesbeth Abbenes y luce como un museo ya que sus paredes está pintado el manto que llevó el rey Guillermo Alejandro I en la ceremonia de su coronación, un par de patines de hielo, un acordeón, una naranja aludiendo al apellido Orange y la mascota de la familia.
La oficina de Máxima es moderna y luce una lámpara colgante, una obra de arte contemporánea sobre la chimenea, piezas de cerámica de Delft y un armario vintage. El escritorio del Príncipe de Holanda también tiene detalles de diseño contemporáneo.
La biblioteca es azul Francia y posee un mural botánico en una de las paredes que marca la continuidad de los ambientes y su luminaria es led. Hay retratos familiares además de pinturas de antepasados.
El color dorado y el negro son los predominantes en la Sala China que cuenta con una enorme chimenea y candelabros. El comedor es blanco y lleva figuras grabadas en el techo. La sala japonesa, con motivos orientales y detalles en azul.
Un espacio elegante y extravagante, espacioso, para que la familia de 5 viva feliz y cumpla con sus obligaciones reales.