Marcela Baños pasó días terribles este fin de semana. A la panelista le hackearon su línea telefónica y le intervinieron su celular. En Intrusos reveló que fue víctima del ciberdelito y confesó haber tenido mucho miedo.
El pasado viernes a la noche Marcela Baños no pudo ingresar a las redes sociales y perdió el control de su celular, aún teniéndolo en sus manos. Gracias al mensaje de un amigo pudo darse cuenta que le habían hackeado sus cuentas y entró en pánico.
“Estoy viviendo un fin de semana de pesadilla, esto arrancó el viernes a las once y media de la noche. Estaba trabajando y tenía justo música en mi celular, estaba ingresando en mis redes sociales y automáticamente veo que no puedo ingresar a Twitter. Dije: ‘¡Qué raro!´. Después al toque, Instagram tampoco. Me pareció raro porque tengo todo conectado. Entonces me llama un amigo y me dice: ‘¿Vos subiste ese video a Instagram?’. Ahí me di cuenta de que me habían hackeado la cuenta”, comenzó el relató de Baños.
Lo primer que sucedió fue que le publicaron un video un tanto extraño en el que “mostraban dinero, ostentosamente, aparecían dólares y mostraban a un grupo de cumbia que se llama Zamaray. Los chicos viven en Holanda y no tienen nada que ver. En este momento es la contra de L-Gante, ponele, y también mostraban un video de él”, detalló.
Y continuó: “También me cambiaron la foto y pusieron la de un chico que, supuestamente, es el cantante de Zamaray, no sabía por dónde venía la mano, no entendía nada, a los chicos no los conozco”.
Además, se mostró muy asustada con la situación y explicó: “Me llamó la atención que no tenía datos, entonces estaba totalmente ajena a todo lo que podía pasar con mi celular a partir de ese momento, más allá de que no sabía si podían llamar a mis contactos. Las redes sociales me las bloquearon todas, no sabían si podían usar mis tarjetas de crédito, llamar a mi familia, podía pasar cualquier cosa”.
Finalmente, Marcela Baños habló con un profesional de la cibernética que la ayudó a recuperar algunas de sus redes, pero lo peor fue que le hackearon también la línea telefónica.
“Por suerte tenía el wifi, que me permitió poder comunicarme y pude hablar con la empresa de telefonía. Me dijeron que se activó un chip de autogestión. Los que lo hicieron sabían todo, te activan tu chip y te roban tu línea, y a partir de ahí, fuiste”, dijo enojada.
La periodista se mostró dolida y molesta con la situación: “Toman tu persona y no sabés lo que son capaces de hacer. Mis cuentas no las movieron, por eso no sé ni para qué lo hacen”. “Esto parece una serie, no puedo creer lo que estoy viviendo”, agregó.
A raíz de lo ocurrido, decidió hacer una denuncia penal. “Me sentí nuevamente ultrajada. Es tremendo lo que me pasó. Me sentí sola, desnuda y en la selva. Es loco que esta gente llama a un lugar y hace con vos lo que quieran. Le puede pasar a cualquiera. Somos nada”, cerró.