Ya son 28 los días que pasaron desde la última vez que Marcela Tauro se sentó en el panel de “Intrusos”. La última vez que se la vio al aire tuvo una fuerte discusión con Jorge Rial, que habría continuado detrás de cámara en uno de los cortes. Después de eso, la panelista nunca volvió.
Y el argumento de una “rotación interna” resulta poco creíble a esta altura, entonces la posibilidad de que la histórica panelista vuelva a ocupar su lugar, en el que se sentó por primera vez hace 17 años, parece cada vez más lejana. Pero lo llamativo es el silencio de la partes. Pese a tamaño escándalo, nadie del ciclo de América ha vuelto a hablar del conflicto, ni mucho menos han tomado partido por uno o por otro.
El que explicó por qué nadie habla de lo que sucede realmente sobre la ausencia de Tauro fue Adrián Pallares. En diálogo con Daniel Ambrosino, también miembro del ciclo que conduce Rial, y Adriana Salgueiro en su programa radial “Espléndidos e infidentes”, dio los motivos.
“No somos cobardes, no hablamos porque ella nos pidió que no lo hiciéramos. Marcela nos dijo que es un tema de ella y del canal, que ella tiene que resolver con la empresa”, sostuvo el periodista, que más de una vez ha tenido que tomar las riendas ante la ausencia del conductor.
Apenas había estallado el conflicto, el también productor, había dicho que “lo que pasó fue lo que pasó al aire, un intercambio de opiniones sobre un testimonio, y en estas peleas de ‘papá y mamá’ nadie se mete. Yo trabajo hace siete años en Intrusos y ellos se conocen hace 30 años, son historias de años de conocerse y conocer sus timings”.
Los últimos rumores indicaban que desde la señal que dirige Liliana Parodi le iban a ofrecer a Tauro regresar al programa y hacer como si nada hubiese pasado. Lo cierto es que la resolución del conflicto, con abogados de por medio, se sigue dilatando y Marcela aún no sale al aire.