Desde que fue presentada en el jurado del “Cantando 2020”, Moria Casán dejó en claro que la participación de Laurita Fernández no le caía en gracia. Incluso, a segundos de haberla presentado intentó cambiarle su nombre y la rebajó a “co-conductora”. Pero en la noche del martes, el desprecio de la diva por la bailarina llegó a su punto máximo, al punto de querer abandonar el programa.
La furia de Moria se desató cuando Laurita la apuró en su devolución “para que entren las cuatro parejas” que faltaban. Es que la jurado todavía no le había dado su nota secreta a Adabel Guerrero, pero se extendió criticando la “master class” de Nacha Guevara en su devolución. En ese momento, Ángel de Brito la interrumpió y le preguntó si su devolución se refería a la participante o a su colega, a lo que respondió: “Soy la bastonera, puedo interrumpir. A propósito, estoy viendo que la señorita co-conductora hoy es un pulpo, quiero que hables más vos querido”.
Sin acuse de recibo a la crítica, la rubia la apuró: “A mí me gustaría que des la devolución, Moria”. Esto no le gustó nada a artista, quien contestó con su lengua karateka: “Vos estás para co-conducir y yo estoy para dar la devolución cuando se me cante. Así que tranquila. Dejalo hablar un poco al conductor, mi amor”.
Finalmente, la One le dio su puntaje a Adabel y los conductores la despidieron y justo antes de que la participante dejara el estudio, la diva ortomolecular quiso hacer una acotación, pero Fernández la paró de inmediato y la dejó con la palabra en la boca.
Casán lo tomó como una falta de respeto y se levantó muy enojada de su silla con toda la intención de abandonar el estudio, pero se quedó parada a un costado de sus compañeros. Luego de la presentación de Dan Breitman, el conductor le dio lugar para que hiciera su descargo.
“Quiero aclarar una cosa. Recién yo quise hablar. Acá me dicen que hay que hacer todo rápido porque tienen que entrar las cuatro parejas para la dinámica, por el COVID, por la nueva vida, por la nueva era...Yo firmé acá y lo hice venir a César Carozza para no ser jurado. Porque yo jurado fui diez años y no quiero tener el culo en forma de silla para dar devoluciones a gente que algunos conozco y otros no, pero merecen mi respeto. Porque a mi me pagan para puntuar al cuatro de copas y al As de espada”, comenzó a toda furia.
Luego, reveló más detalles del acuerdo al que llegó con la producción, el cual aseguró que no se respeta: “Yo podía frenarlos a ustedes y a quién quiera. Así me prometieron a mí: ‘Moria tiene plano libre’. El plano libre no es ser jurado como el que está acá -dijo señalando a su compañeros-. Si quiero puedo dar devoluciones y puedo decirle a la señorita co conductora que es un pulpito y te puedo decir a vos que hables más. Y quería decir una cosa de Adabel porque eso es lo que yo arreglé”
“Si no se me respeta, me voy mi amor. No tengo nada ni contra vos ni contra nadie. Pero no me interesa poner mi culo ahí para dale devoluciones a ustedes y que me estén corriendo. Si no viene el noticiero, viene el COVID, y si no viene el COVID... No, no es así la vida”, advirtió, visiblemente muy molesta.
De Brito intentó explicarle que tenían que entrar todas las parejas que quedaban para que hoy se pudiera hacer la sentencia, entonces Moria le ofreció una solución: “Entonces si me quedo, porque después voy a hablar con producción o lo hago venir a hablar a mi abogado porque esto no es lo que yo plantee, los voy a puntuar sin hablar. Para no perder tiempo”, dijo y volvió al estrado.
La pelea entre ella y Laurita viene de larga data. En 2017, cuando Moria estaba todavía en el jurado y la bailarina participaba junto a Fede Bal, ya se sacaban chispas en las devoluciones. Pero el principal rencor entre ellas es que en 2018, cuando Casán fue sacada del programa de Marcelo Tinelli, la silla vacante fue ocupada por la misma Laurita, algo que no agradó demasiado a morocha.