Desde hace algunas semanas se conoció la noticia de la crisis de pareja que viven el Pollo Álvarez y Tefi Russo y, si bien los protagonistas no negaron la situación manifestaron que se aman y luchan por el matrimonio.
Si bien el conductor del Trece y la cocinera ya no duermen juntos en su casa de Tigre habitan bajo el mismo techo pocas noches a la semana y en “LAM” (El Trece) comentaron el motivo que habría originado la crisis en los recién casados.
Al parecer el hecho de agrandar la familia, tener hijos sería el motivo por el que los esposos no están pasando su mejor momento.
Ángel De Brito comenzó a tratar el tema comentando que el conductor de “Nosotros a la Mañana” le dijo que no estaba separado de Russo. Luego Mariana Brey agregó: “No, no están separados. Aunque sí están viviendo, no todos los días pero si en algunos días particulares de la semana, en casas separadas. Él va a un hotel que tiene por canje”.
“Yo hablé con él domingo y me dijo que estaban juntos, que la pandemia los había afectado, como a un montón de parejas”, sumó el conductor. Luego Brey comentó una charla que mantuvo con Tefi: “Lo que me contaba es que El Pollo tiene un gran deseo de ser papá y ella tiene a su hija de 11 años. Hablé con ella, hablé con el Pollo y hablé con un tercero en discordia”, concluyó la panelista.
En una entrevista al diario La Nación, la creadora de “Inutilísimas” comentó: “El Pollo quiere ser papá pero yo no quiero tener otro hijo. Estamos en un problemita porque él tiene muchas ganas y yo no quiero saber nada. Todavía no nos ponemos de acuerdo. Estamos viendo quién de los dos cede porque no hay un punto medio, no es algo que podamos negociar: lo tenés o no lo tenés”, añadió y luego dijo que no está preparada para comenzar de nuevo con el tema maternal: “Los pañales, levantarse de noche... Quiero tener realmente ganas de ser mamá y no negociarlo porque él quiere ser papá. Cada mañana me levanto buscando esas ganas y todavía no llegan”, dijo.
Finalmente la conductora dijo: “Es un tema que lo charlamos mucho con el Pollo. Me confesó, con el tiempo, que él pensaba que yo iba a cambiar de parecer, que me iba a convencer. Nunca se sabe, quizá una mañana me levanto con la maternidad a flor de piel”, concluyó.