Soledad Pastorutti es una de las artistas populares más aclamadas por el público argentino. No solo su voz y energía cautivan en vivo, sino también sus acertadísimos looks que la renuevan y la imponen como ícono de la moda.
En una experiencia única que quedará marcada a fuego en su corazón, la cantante se presentó semanas atrás en el estadio Movistar Arena de Buenos Aires y llenó las más de 10 mil butacas. Para el show, la Sole optó por varios vestuarios. Si bien muy sensuales y que le permiten exhibir su privilegiada figura, siempre con algún diseño con reminiscencia a las raíces.
La gente la adora y la sigue a donde vaya, tal como dice su canción. El fanatismo por la cantora de Arequito se ve en las redes y en los conciertos en vivo. Las reacciones en sus publicaciones son de amor puro y la artista también les devuelve amor en forma de música.
La tricampeona de “La voz Argentina” tuvo varios cambios de vestuario durante el show de octubre, pero el que se llevó todos los aplausos y miradas fue el rojo.
La Sole apareció en el escenario con un vestido ardiente con el que se la veía prendida fuego. Se trata de una prenda con recortes y transparencias que dejaron ver mucha piel, además de mostrar sus esculturales piernas.
La intérprete de “Quiero todo” lució un vestido cortito, con falda plisada irregular que dejó ver su pierna derecha hasta bien arriba, casi rozando la cadera. En la cintura lleva una faja típica de gauchos.
La parte de arriba era sin mangas, con cuello alto y con una abertura en la zona del pecho.
Sumó guantes largos del mismo rojo fuego y ató su pelo con trencitas adelante y una media cola.
El vestuario osado que La Sole escogió para su show
La Sole acaba de cumplir 42 años y desde hace un tiempo elige mostrar su versión más sensual, elegante y provocativa. Se la juega con tonos llamativos, escotes y tajos que muestren su figura.
Como ella misma afirmó en una entrevista, su femineidad es natural y ya era hora de dejarla salir en todos los ámbitos.