Literalmente Barbie Pucheta se encuentra en la cuenta regresiva, porque ya se encuentra dando los últimos toques a lo que será su casamiento con Lucas Rodríguez, su novio desde hace casi 4 años. Ellos pasaron de ser hermanastros a novios y ahora están en los preparativos de la ceremonia íntima en la que sellarán su amor, en la última semana de Septiembre.
“Estoy nerviosa y ansiosa. Tengo una ansiedad que no les puedo explicar”, dijo en algunas Stories que compartió hace un día por su Instagram, donde recibió muchas preguntas de sus seguidores sobre los preparativos del casamiento. En las preguntas también surgieron dudas sobre un futuro bebé, pero confesó que ni siquiera se lo han planteado todavía.
Entre sus dudas principales, la hija Nazarena Vélez confesó que todavía no ha elegido los padrinos, a causa de una duda bastante grande: “Me estoy ahogando en un vaso de agua a ver si me pueden ayudar. Creo que hay testigos en lo que es civil y padrinos en la ceremonia. ¿Son los mismos para ambos?”. Su casamiento va a ser organizado por Jano Eventos.
El vestido de Barbie Pucheta
Muchos pensaron que con su participación en Corte y Confección, la actriz aprovecharía y haría por mano propia su vestido de novia. Incluso en un momento surgieron nuevas dudas cuando se la vio probándose el modelo de su abuela. Pero finalmente la joven ha aclarado la situación.
Confesó que hasta el momento no había dicho nada, pero que en realidad ya tenía el vestido de su casamiento. El modelo era uno con el que venía soñando desde hace tiempo. “Hace unos años se casó una amiga y yo quedé enamorada del vestido, el diseño, la calidad”, explicó aunque aclaró que no es el mismo diseño.
“Cuando empecé a buscar vestidos en diciembre lo primero que hice fue buscarlo en este lugar porque tenía ese recuerdo que lo amaba. Vi uno que me encantó y no encontré en otro que sea tan espectacular. Era el vestido de mis sueños”, contó sobre el modelo que se compró en Barcelona, en la casa Pro Novias.
Al final, a causa de que no pudo viajar, la actriz visitó un atelier donde pudieron hacer su sueño realidad. El lugar se llama Atelier Recoleta y le dio la posibilidad de encargar su vestido, en su caso para hacer.
Entre otros detalles, dijo que tanto peinado y como zapatos los va a elegir cuando tenga su vestido y pueda probarselo.