Después de varias idas y vueltas, finalmente Vicky Xipolitakis fue desalojada del lujoso piso ubicado en calle Marcelo T. de Alvear en Recoleta, Buenos Aires. La griega vivía ahí con su hijo Salvador Uriel, pero debió dejarlo por problemas judiciales con su ex y padre del niño, Javier Naselli.
En agosto pasado había trascendido la noticia de que Xipolitakis debía abandonar el lujoso inmueble en el que vivía por una orden de desalojo que le había llegado. Pero luego Vicky afirmó que no la desalojaron y que la decisión de mudarse fue meramente personal.
Una vez que dejó el piso, la exvedette se mudó con su hijo a la casa de sus padres ubicada en Lanús. No le quedó otra que regresar a la casa familiar, aunque asegura que no será por mucho tiempo ya que tiene en la mira una casa para instalarse allí con el niño.
Fue Vicky quien contó de la mudanza y la situación en la que están con Salvador. Habló en total confianza en Cortá por Lozano (Telefe), programa en el que trabaja como panelista.
La palabra de Vicky Xipolitakis tras el supuesto desalojo
“Mi hijo está hermoso, por suerte y el año que viene empezará el jardín”, contó sobre el pequeño. Y luego aclaró: “Estoy mudada ya por suerte y estamos en la casa de mamá y papá. Entregué el departamento y estoy en un impasse en la casa de mis padres”.
“La idea es mudarnos a una casita nueva que tengo en vista y a la que nos mudaremos muy pronto”, comenzó diciendo.
La zona predilecta de Vicky Xipolitakis es Puerto Madero, ahí es donde vivió cuando se independizó de sus padres, en plena fama como “la griega” junto a su hermana.
“Me sentía desprotegida y desde que me fui del departamento anterior, no quiero ni pasar por esa calle porque me trae malos recuerdos”, expresó a una a llegada.