La hamburguesa es uno de los clásicos más reconocidos a nivel mundial: desde la expansión de las grandes cadenas multinacionales hasta las cervecerías que la implementan como menú principal. Tan clásico es que tiene hasta un día propio, cada 28 de mayo se celebra el Día Mundial de la Hamburguesa.
Si bien se desconoce el verdadero origen de la hamburguesa, se asocia, como su propio nombre indica, a Hamburgo, a los alemanes emigrados a Estados Unidos y a la ya no tan emergente cultura de la comida rápida. Hoy en día se encuentran un sin fin de variedades, hamburguesas caseras, gourmet, vegetarianas, hamburguesa de lentejas, garbanzos y también hay de pollo.
Trucos para preparar la hamburguesa perfecta
La carne es la que marcará esta receta. Lo ideal es que la carne molida sea lo más fresca posible y sepamos de qué estará hecha.
Hay muchas formas de cocinar una hamburguesa, pero la más auténtica es a la parrilla. Expertos afirman que no debe estar más de 4 minutos por cada lado o quedará demasiado seca. También es recomendable sacarla de la heladera 45 minutos antes de empezar el plato para que tenga una temperatura más adecuada antes de cocinarse.
La importancia de un buen pan. Cualquiera que utilicemos en una hamburguesa deberá ser blando. Si tiene una corteza dura ya no estaremos hablando de una hamburguesa, sino de un sándwich.
El queso tiene un papel principal. Una hamburguesa sin queso no es una hamburguesa. En la receta más tradicional se necesita un queso cheddar, aunque podemos utilizar cualquiera que cumpla la condición principal, sea cremoso y se funda con el resto de los ingredientes.
