Ellos parecen llevarse el mundo por delante, saber de todo, y cubrir toda necesidad informativa y formativa con las últimas apps que las tecnología les provee.
Pero en ese mar de facilidades puede aparecer la trampa de creer que los adolescentes están informados sobre sexualidad y sexo.
Nada más lejano, ya que en realidad el diálogo, la información profesional y las precauciones reales para cada edad, no son algo que venga online. Sólo los padres pueden sostener un ida y vuelta enriquecedor, que lejos de asustarlos, prohibirles o llenarlos de prejuicios, los enriquezca y los proteja desde su propio conocimiento.
¿Qué saben los adolescentes de hoy respecto al sexo?
¿Qué puntos centrales deben conocer y manejar a la hora de relacionarse cara a cara, u online?
Aquí, diez puntos claves para no pasar por alto, con el aval profesional, que podés aportarles en una charla sobre el tema.
Hablemos de sexo... ¡Y mucho!
Según apunta el sexólogo y psicólogo Germán Gregorio Morassutti: “Hay muchos temas centrales en el período de la adolescencia, ya que es la etapa de comienzo de la vida sexual y en pareja. Por ello es fundamental que los hijos manejen varios aspectos sobre sexualidad”.
Algunos de ellos son esenciales:
1. El primer tema es que tienen que estar informados sobre lo que implica su desarrollo biológico. "Conocer su cuerpo, qué es lo que está cambiando en él y por qué, y por sobre todo cómo cuidarlo es muy importante como punto de partida".
2. Hablar con ellos el tema de las identidades sexuales. "Algo que tiene que ver con cómo se siente y define una persona. Este aspecto es algo que se va a ir conformando, y se va a terminar de definir por lo general durante la adolescencia, ya que es una etapa de búsqueda interna.
El adolescente no sólo tiene que saber que está atravesando una definición de su identidad (algo que le sucede a todos) sino también internalizar y respetar que existen otras identidades, para poder manejarse siempre con respeto hacia los demás. Son temas que se van trabajando con los hijos desde pequeños”.
3. Hablar sobre orientación sexual. "Cuando hablamos de orientación aludimos a quién nos enamora. Lo que podemos trabajar desde ahí con los adolescentes es el factor común: el enamoramiento, y la idea de que todos sentimos amor, independientemente de la persona que se elija".
4. Las prácticas sexuales. "Muchos adolescentes no manejan información al respecto, por lo tanto hablar con ellos sobre este punto es más que fundamental.
Si bien también existe un gran número de jóvenes que conoce sobre estas prácticas (sexo oral, masturbación, coito, etc.) no cuentan con toda la información, o internalizan muchos errores que desde la charla hay que corregir. ¿Un ejemplo? Pensar que determinadas prácticas sexuales son anticonceptivas, que implican riesgo de embarazo o contagio de enfermedades. Hay mucha información popular a través de los medios, pero desconocen de qué se trata. Desde ahí la importancia de la charla con los padres, para saber a ciencia cierta qué información maneja”.
5. Planificar cuándo se van a tener relaciones sexuales con la pareja. "Es fundamental que se hable con los hijos para que sepan analizar con anticipación cómo programar y cuidarse para ese momento.
Lo más importante es que nunca sean forzados a nada, que sepan que ninguna conducta violenta tiene que ver con una demostración de amor, ni tampoco los celos, ni las prácticas en las que no se respete la libertad”.
6. Hacerlos salir de la cultura falo céntrica. "Este concepto interfiere mucho en la sexualidad (tanto de mujeres como varones) ya que replica que la misma sólo se puede experimentar por penetración y con el consiguiente placer. Hay otros tipos de encuentros sexuales, simplificarlo a la penetración de manera exclusiva es un error".
7. Que entiendan la sexualidad como un encuentro con otro para darse placer. "Es central que los adolescentes internalicen el encuentro íntimo como un momento de consideración con la otra persona".
8. El uso del preservativo como práctica frecuente, siempre. "Algo orientado a todas las prácticas sexuales, pero entendido no sólo como método de prevención del embarazo, sino también de enfermedades de transmisión sexual".
9. Que puedan desarrollar conductas protectoras. "Referentes no sólo al respeto de su propio cuerpo, sino para controlar la exposición que implican las redes sociales y el cuidado hacia las mismas. Los adolescentes tienen que ser conscientes de que hay un otro del otro lado de la red, que puede mentir respecto a su identidad, edad e intenciones. Por ello tienen que ser cuidadosos acerca de cualquier imagen o contenido de sí mismos, o de otros, que suban a este tipo de plataformas. No sólo los papás deben saber y vigilar las redes sociales de sus hijos, sino éstos conocer a qué tipo de situaciones pueden exponerse si no se cuidan".
10. Preservarlos de estímulos para los que no estén preparados. "Si bien el consumo de pornografía tiene que ver con la estimulación, el erotismo y la sexualidad, es importante que los padres abran siempre los espacios de comunicación y charla, porque a veces a través de los medios los chicos pueden quedar expuestos a imágenes y contenidos que aún no están listos para procesar.
Para agendar
"Jornadas de salud sexual y reproductiva para escuelas"
Día: Viernes 25 de agosto
Hora: desde las 8 a las 16
Lugar: Nave Cultural
"In a Heartbeat", un relato visual de amor entre dos chicos
Los cineastas, Beth David, de 21 años, y Esteban Bravo, de 24, hicieron el corto para su trabajo de tesis mientras estudiaban en el Ringling College of Art and Design, en Sarasota, Florida, de donde se graduaron hace poco.
Fue una labor que tomó cerca de año y medio, y que cautivó a la gente con el concepto del cortometraje que materializaron.
La versión se volvió viral en YouTube y cuenta la historia de Sherwin, un adolescente pelirrojo que siente un amor platónico por Jonathan (el chico más popular de la escuela). Sherwin teme mostrar sus emociones, pero sin que eso importe, su corazón se ofrece a cumplir con la misión y literalmente salta de su pecho y se dirige al chico que atrapó su atención. El corazón no miente.