River no pudo con San Martín de San Juan, con el que finalmente igualó 1-1. El equipo de Gallardo interrumpió así la marcha ideal que había adquirido en los dos primeros partidos, mientras que el Verdinegro sumó su segunda unidad, aunque sigue sin ganar.
Lo más destacado de los 45’ iniciales consistió en el reconocimiento a Maidana, aplaudido a rabiar por la tribuna 'loca a los 2’, por sus seis años de compromiso con la camiseta de la Banda roja. Pero en ese primer tiempo, el local asumió la iniciativa, sí es cierto. Pero le costó traducir ese intención de jugar en campo contrario.
Más allá de que Ponzio se instaló bien en la zona central, quitando y distribuyendo con criterio, el Millo no pudo generar situaciones de riesgo. Por el contrario, el visitante tuvo la primera aproximación concreta, sobre los 20’, cuando Villarruel metió un disparo cruzado que se fue afuera.
Y Cuando poco pasaba en el partido, a los 29’, los de Gallardo se pusieron arriba en la pizarra. Fernández mandó un centro desde el costado derecho, justito para la cabeza de Alario, quien hizo un movimiento sutil y descolocó a Ardente.
En la segunda parte, con el marcador a su favor, pareció que River iba a consolidar la diferencia, haciéndose fuerte en la posesión del balón. Asomó Pity Martínez, con algunas maniobras interesantes; D’Alessandro buscó hacerse referencia.
Pero los dos alternaron buenas con malas y así los locales no pudieron plasmar esa superioridad que se palpaba en el ambiente. Entonces, San Martín, que nunca renunció a la chance de jugar, tuvo la oportunidad y no la dilapidó. Fue sobre los 12’, cuando Navarro abrió hacia la izquierda para un interesante Montagna y el jugador cuyo pase pertenece a San Lorenzo metió desborde y centro.
Por el centro surgió Villarruel, quien llegó apareado por defensores rivales, pero se hizo un hueco para meter el remate que decretó la igualdad. El gol provocó un cimbronazo en un River que se vio sorprendido y no tuvo respuestas. Se le cerraron los caminos; el paraguayo Moreira ya no subió tanto y dependió de alguna que otra maniobra aislada.
Así, cuando el encuentro ingresaba en la penumbra, el debutante Olivera le metió un pase en cortada a Alonso y el uruguayo reventó el travesaño. No hubo tiempo para más.
Una interna que sigue dando para hablar
La interna de la barra brava de River abrió ayer un nuevo capítulo. El sector disidente, que desde hace años quiere tomar el control, colgó en la General Paz varios pasacalles intimidatorios para la facción “oficial” amenazando con volver. En uno de ellos recordaron a Gonzalo Acro, barra asesinado en 2009.
Los mensajes se vieron a lo largo de dicha Avenida, arteria que marca el límite entre la Ciudad de Buenos Aires y la Provincia y que conduce al Monumental. En esos carteles se anuncia el regreso de “los Borrachos” y habla de “los verdaderos pibes vuelven” en medio de amenazas a los “ortivas” que hoy manejan el negocio de la barra.
Esta ‘lucha’ tuvo su punto más fuerte en las semis de la Sudamericana de 2014 y desde entonces las amenazas entre ambos bandos son recurrentes. Incluso, pocos días atrás fue detenido uno de los líderes de “La Barra del Oeste” por amenazar vía Twitter a Rodolfo D’Onofrio, presidente del Millo.