La economía es contra-intuitiva. ¿Qué significa esto? Significa que las soluciones que primero se vienen a la cabeza en general terminan siendo la peor solución.
Un ejemplo: un grupo de inquilinos reclama que el precio de los alquileres está aumentando mucho. Ante eso, el gobierno congela el precio de los alquileres. Parece ser la solución, ¿no? Pero al cabo de unos meses, los propietarios dejarán de alquilar sus inmuebles (ya no les rinde lo que reciben), empezarán a escasear los departamentos y casas, y el precio en el mercado negro subirá aún más.
La solución que pareció lógica, terminó aumentando el problema.
Hay algunos problemas donde lo peor que puede hacerse es aplicar “la primera solución” para ellos, porque terminan provocando un problema mayor.
Veamos un ejemplo médico: un paciente con problemas respiratorios, estando en una crisis de abstinencia, grita a los médicos que le den un cigarrillo. Ante ese hecho, difícilmente veamos a un médico proveerle un cigarrillo, porque darle ese gustito es contraproducente con el objetivo del médico, que es sanar al paciente.
Cuando una sociedad pide a gritos que le aumenten el sueldo, la intuición diría que lo mejor sería firmar un decreto y “llenar los bolsillos de la gente”. Parece ser lógico, ¿no? Pero en economía las soluciones que primero se vienen a la cabeza en general terminan siendo la peor solución.
Sin un aumento de la productividad, un aumento de sueldo es un aumento de costos, es decir que el sueldo que nos aumentan, finalmente provocará un aumento de los precios de todos los bienes, y en pocos meses estaremos pidiendo “paritarias” para otro aumento, y así .... hasta que pidamos un nuevo gobierno, que nos llenará la heladera.
La heladera se llena produciendo. Produciendo bienes y servicios con los que luego intercambiamos. Las soluciones que apuntan a la magia suelen terminar siendo como el último atado de cigarrillo que algún médico irresponsable acerca al paciente moribundo.
Mauricio Gallardo - DNI 22.790.843
