La Argentina tiene uno de los salarios mínimos más bajos de América Latina. Los vecinos de la región con mejores remuneraciones, como Costa Rica, Uruguay y Chile, duplican el ingreso que se percibe en el país.
Así se desprende de datos relevados para cada país con la información disponible hasta la actualidad. El gobierno de Javier Milei dispuso en febrero que el salario mínimo de ese mes pasaría de $156.000 mensuales a $180.000, para llegar a los $208.000 en marzo. Eso da como resultado que este ingreso equivale a USD 200,80 al tipo de cambio libre.
Así, Argentina se quedó entre los cinco países con el ingreso más bajo de la región junto a Nicaragua, Haití, Cuba y Venezuela.
Los países con salarios mínimos más altos de Latinoamérica son Costa Rica (USD 714), Uruguay (USD 594), Chile (USD 470), Ecuador (USD 460) y México (USD 456).
En tanto, Brasil, principal economía de la región, se ubica de la mitad de tabla para abajo (USD 282), informó la agencia Noticias Argentinas.
La Argentina volvió a registrar en febrero la inflación más alta del mundo, por encima del Líbano y Venezuela. La brecha es creciente en el podio y las perspectivas internacionales anticipan que no habrá cambios en esa tendencia.
En febrero, el país registró una suba de los precios al consumidor del 13,2% y del 276% en un año, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
El último dato del Líbano corresponde a enero, con un 177% anual, mientras que en Venezuela el Observatorio de Finanzas (OVF) registró una deflación del -0,5% en un mes y una suba del 85% en 12 meses.
En tanto, el Banco Central del régimen de Nicolás Maduro informó un incremento mensual del 1,2% y uno anual del 75,9 por ciento.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) indicó que el 80% de los países registrará un descenso en su nivel de inflación este año respecto del 2023, una mejora que no se observaría en la Argentina. En promedio, el mundo exhibirá una suba de los precios del 5,8% en 2024, frente a una cifra superior al 200% en la Argentina.
Debido a los efectos de la última devaluación y la inflación, en los últimos meses los argentinos sufrieron un fuerte deterioro en la capacidad de compra de sus salarios.
Pero la debilidad de los sueldos se percibe con mucha más claridad cuando se compara a la economía argentina con la de otros países y más aún si se trata de los países vecinos.
Según un informe elaborado por la consultora Focus Market, el ingreso de los argentinos, medidos en dólares, se acercan hoy a los niveles de la salida del régimen de la convertibilidad.
“La inflación no ha dado respiro en los últimos 13 años y en el acumulado el salario ha perdido fuertemente frente a la variación de precios en la economía”, explicó Damián Di Pace, director de la consultora.
“Sin argentinos que tomen el riesgo de invertir sus ahorros no hay producción ni empleo. Sin empleo y mayor crecimiento en la producción es imposible mejorar el ingreso. Con un Estado que financia su mala e ineficiente administración del sector público, con impuestos que recaen sobre el que arriesga, y emisión monetaria que recae sobre la pérdida de poder adquisitivo de nuestra moneda, la aversión al riesgo ha sido cada vez mayor en los últimos tiempos. Nadie invierte ni produce”, agregó el analista.