Hace ya varias semanas, en las fincas mendocinas comenzó la cosecha de uva que llegará hasta el mes de abril. Desde antes que salga el sol y hasta la tarde, decenas y decenas de mujeres y hombres recorren las hileras cargando en sus hombros tachos rebalsados de racimos que pronto se convertirán en los vinos del 2022.
Aunque esta temporada se ha visto marcada por la dificultad de conseguir cosechadores, ya que muchos eligen irse a trabajar a la construcción o a otro tipo de cosechas (frutas o ajo), todavía es una de las profesiones más tradicionales de la provincia.
Pero Argentina no es el único lugar en el mundo donde se vive la vendimia. Aunque en otras regiones del nuevo y viejo mundo vitivinícola la cosecha está tecnificada y la mayoría del trabajo todavía existe la cosecha manual y la metodología de trabajo es muy similar: largas jornadas de trabajo bajo el sol por un pago que puede ser por hora, por día o por cantidad cosechada.
Cómo es la cosecha en otros países
Si bien en nuestro país es común ver personas mayores que ya tienen en sus hombros la experiencia de decenas de cosecha, en la mayoría de los países lo que se pide son trabajadores jóvenes mayores de 18 años.
Por ejemplo, en una de las convocatorias de España para cosecha de frutas advierten que se trata de un trabajo temporal que exige estar en una muy buena forma física. Así mismo aconsejan tener movilidad propia o conseguir un alojamiento cercano al lugar de trabajo, ya que las zonas rurales están bastante alejadas y hay pocos transportes públicos que llegan ahí.
Algo similar sucede con los pedidos en Francia. En el país galo el trabajo se organiza, tal como en el caso de muchas fincas de Argentina, por cuadrillas o grupos de trabajo de entre 8 y 20 personas que cosechan en una zona particular del viñedo.
El tiempo estimado de trabajo es de 35 horas a la semana, pero en algunos casos puede llegar a las 43. En el caso de esas horas excedentes del límite de las 35 se pagan como extras.
En ambos países europeos, aunque puede variar dependiendo de las regiones, la cosecha se da entre los meses de agosto y octubre, siendo septiembre el mes de mayor intensidad. Asimismo, el trabajo en una finca puede durar alrededor de tres semanas.
Otra de las alternativas es Australia, donde la cosecha de fruta representa uno de los trabajos de más fácil acceso, sobre todo para aquellos que acaban de llegar al país y aún no tienen un nivel de inglés suficiente para desempeñar otros trabajos más calificados. Al estar en el hemisferio sur, como Argentina, la cosecha se da de manera más intensa entre los meses de febrero y marzo.
Cuánto pagan en otros países por la cosecha de uva
Un cosechador en España, al menos en la última vendimia de 2021, el precio que se pagaba por día era de 60 euros. En el caso de Francia, el salario mínimo aproximado es de 10,15 euros por hora, por lo que con 35 horas de trabajo se podría ganar unos 355 euros por semana. En el caso de Australia, un cosechador de uva puede llegar a cobrar como promedio unos 18 o 19 dólares australianos por hora.