Con una inflación que parecía haber desacelerado en noviembre y diciembre, sólo para recuperar el ritmo ascendente en el inicio de 2023, y llegar a un 8,3% en marzo en la provincia, las familias ven cómo los ingresos son alcanzados y, en muchos casos, superados, por el aumento en los precios. Un consultora privada informó que un grupo familiar típico necesita, en Mendoza, $257.200 para no percibirse pobre.
Según relevamientos propios de la consultora Evaluecon -encuestas telefónicas y consultas con distintos organismos privados-, una familia tipo que, según la definición del Indec, esté conformada por un varón de 35 años, una mujer de 31, una niña de 8 y un niño de 5, tuvo los siguientes gastos promedio en abril (redondeados para mayor claridad):
- Alquiler: $92.000
- Impuestos y servicios: $10.700
- Alimentos y Bebidas $71.000 (incluyendo elementos de limpieza, tocador, etc.)
- Gastos varios: $9.500
- Indumentaria: $41.000
- Atención médica y gastos para la salud: $10.200 (sin incluir personas con tratamientos permanentes)
- Transporte: $16.800 (sin incluir gastos de vehículo, sólo gastos de colectivos)
- Gastos educación: $6.000 (sin incluir cuotas a colegios privados, ni transporte escolar)
De esta manera, el valor de una canasta básica total “digna” alcanzó, el mes pasado, los $257.200 para que una familia tipo “no se sienta pobre o no perciba que está en niveles de pobreza”. En marzo, el monto había sido de $256.400.
En el informe de Evaluecon se plantea que “los consumidores ya no tienen referencia de qué es ‘caro’ y ‘barato’” y que “la inercia, la especulación, el querer cubrirse hacen que no se pueda saber bien qué precios pueden ser de equilibrio. Esto ha llevado a la mayoría de las familias a sobre stockearse en alimentos no perecederos, previendo mucha mayor inflación, adelantando consumo futuro. Lo que incluso empuja más la inflación”.
Y suman que los rubros de la canasta básica son los que más sufren estos fuertes aumentos y, por ejemplo, el rubro Alimentos y bebidas tuvo un IPC del 17% en abril. Otro de los rubros que más fuerte viene subiendo y que es muy sensible es Alquileres, que no miden las canastas básicas oficiales, y ya roza un 100% de actualización anual.
La misma consultora calculó que, en Mendoza, el Índice de Precios al Consumidor tuvo una suba de 8,62% en abril. Esto implica una suba de tres décimas con respecto a la de marzo, que según los datos oficiales de la Dirección de Estadísticas e Investigaciones de la provincia, fue del 8,3%; la más alta intermensual de los últimos 20 años.