El Consejo Empresario Mendocino (CEM) elaboró un análisis de la evolución de la deuda pública provincial entre 2014 y 2024, que permite apreciar que, cuando los recursos no cubren el total de los gastos, el déficit operativo resultante debe ser financiado con deuda. Esto permite entender el vínculo entre los pasivos y el desempeño fiscal del Estado provincial.
De ahí que entidad insista en la necesidad de que se trate el proyecto de modificación de la Ley de Responsabilidad Fiscal 7314, que ingresó a la Legislatura en abril del año pasado y que establece algunas reglas para cuidar la sostenibilidad de las finanzas provinciales y municipales.
Entre otras, que los presupuestos deben lograr el equilibrio o superávit corriente; que se prohíbe el endeudamiento destinado a financiar erogaciones corrientes primarias; que los recursos de capital tendrán afectación específica a erogaciones de capital y/o amortización de deuda consolidada y/o integración del fondo anticíclico; y que la relación de cargos públicos por habitante no puede ser mayor a la existente en diciembre de 2017.
Desde el CEM señalan que varias de estas reglas se incumplieron o se exceptuaron durante muchos ejercicios en los últimos 20 años. “Impulsamos el tratamiento de este proyecto, elaborado por el Ejecutivo provincial, con participación del CEAS (Consejo Económico, Ambiental y Social), organismo consultivo del cual participamos, pues entendemos que enfatiza en reglas fiscales que hacen al respeto de la restricción presupuestaria del Estado y al uso eficiente y eficaz de los recursos públicos”, plantearon y resaltaron que la iniciativa tiene estado parlamentario hace más de 15 meses.
“Endeudarse no es bueno ni malo por sí mismo. Es razonable tomar deuda si contribuye a financiar proyectos que impulsen el desarrollo de la economía, mejorando el bienestar de la población. Es nocivo si financia inversiones de baja o nula rentabilidad social o si, como ocurrió varios años atrás, se usa para financiar gastos corrientes”, manifiesta el documento.