El Directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó este miércoles el desembolso de U$S 7.500 millones correspondiente a las últimas dos fallidas revisiones, pero advirtió que el gobierno deberá tomar medidas para corregir los desequilibrios macroeconómicos, sobre los cuáles le atribuyó parte de la responsabilidad.
El organismo emitió un acotado comunicado en el que describió aspectos generales del nuevo ordenamiento. Los detalles se conocerán el viernes por la tarde.
No obstante, indicó que los cambios que se introdujeron en el programa resultan a cambio del “compromiso de aplicar un nuevo paquete de políticas para corregir reveses en las políticas económicas, salvaguardar la estabilidad y lograr los objetivos del programa”.
Entre los puntos que deja en la nebulosa la comunicación oficial del FMI se destaca la forma en que se realizará la próxima revisión de la cual depende otro desembolso por U$S 2.750 millones de dólares que calza con los vencimientos de noviembre y diciembre.
El FMI dijo que se realizará en noviembre, aunque no aclaró la fecha.
Dado el texto conocido hoy, la actual conducción del país se comprometió a aplicar una serie de medidas para alcanzar determinados objetivos y a partir del escenario electoral que produjo las PASO es una posibilidad que haya cambios en el Poder Ejecutivo nacional al momento de la nueva auditoría.
Por tanto, la ambigüedad en lo comunicado por el FMI abre la posibilidad de que en caso que el gobierno no cumpla lo pactado sea la próxima administración la que deba asumir el costo.
En el limitado comunicado, el organismo dejó en claro que Argentina no cumplió con los objetivos, en parte por la sequía, pero también por decisiones gubernamentales contrarias a lo que se había pactado.
“Al completar las revisiones combinadas, el Directorio Ejecutivo consideró que no se alcanzaron los objetivos clave del programa hasta finales de junio de 2023 debido a la sequía sin precedentes y a desviaciones de las políticas, requiriendo la aprobación de exenciones por incumplimiento”, indicó el FMI.
A su vez, el organismo informó que aprobó las medidas cambiarias vinculadas a la profundización del cepo.
Sobre las nuevas metas se limitó a indicar que habrá cambios en el saldo fiscal primario y de emisión monetaria para financiar el déficit, pero sin dar precisiones.
Tras la publicación del acuerdo, Massa ofreció una conferencia de prensa en la que destacó que el desembolso recibido “garantiza estabilidad hasta fines de noviembre” dado que “en paralelo nos permite transitar una situación de control de los dólares financieros”.
El ministro planteó que lo recibido “multiplica por cinco” la capacidad actual de intervención por parte del Banco Central en el mercado de cambios.
Sin ahondar en detalles, Massa adelantó que se acordó que esa intervención será en un “sistema de bandas” cuyos márgenes sólo son conocidas por las autoridades del Palacio de Hacienda y el staff del FMI para evitar que el sistema sea vulnerado por el mercado.
Por otra parte, el ministro dijo que habrá cambios en las metas de emisión monetaria y de déficit fiscal.
Sobre este último punto, señaló que si bien se mantiene en 1,9% del PBI se modificará la forma en que se computará el déficit del sector público y de los organismos descentralizados, lo que supone una flexibilización de este objetivo.
En otro orden, Massa comunicó que con parte del dinero recibido se devolverán adelantos transitorios al Banco Central por más de $ 500 mil millones para demostrar la intención del gobierno de ordenar las cuentas públicas.
A su vez, el ministro anunció que el viernes se darán a conocer medidas para “compensar” la pérdida del poder adquisitivo por la inflación provocada por la devaluación del 14 de agosto.
Dólar en alza
Por su parte, el mercado cambiario no tomó nota del acuerdo con el FMI, posiblemente porque ya lo daba por descontado y su valor esté directamente ligado al clima político y no a cuestiones económicas.
El dólar “blue” que inició el día retrocediendo a $ 725, revirtió la tendencia y culminó la rueda con un avance de $ 10 en $ 735.
Las operaciones en la Bolsa de Comercio registraron un MEP subiendo a 663,55, mientras que el Contado con Liquidación trepó a $ 747,14.
El Banco Central compró hoy U$S 100 millones y elevó el saldo mensual a U$S 970 millones.