El ministro de Economía, Luis Caputo, confirmó hoy que junio es el sexto mes consecutivo que finaliza con superávit financiero. Durante junio, el Sector Público Nacional (SPN) registró un superávit primario de $488.569 millones y un superávit financiero de $238.189 millones.
En los primeros seis meses del año, el SPN acumula un superávit primario mayor a 1,1% del PIB y un superávit financiero de 0,4% del PIB. Desde el Gobierno, destacaron que “es la primera vez desde 2008 que se alcanzan seis meses consecutivos de superávit financiero”.
Al mismo tiempo destacaron que “este resultado se logró sin haber entrado en vigencia en el período considerado el capítulo fiscal de la Ley de Bases, y vuelve a reafirmar el compromiso del Gobierno con el equilibrio financiero en 2024″.
De esta forma, se confirma el sexto mes consecutivo donde se logra una mayor recaudación que los gastos efectivamente pagados del período y además el sobrante alcanza para cancelar los intereses de deuda.
Lo que en la previa hasta el presidente Javier Milei había advertido que podía ser negativo, dado la presión para las arcas públicas del pago de los aguinaldos, finalmente concluyó con signo positivo.
El detalle de las partidas
Los ingresos totales del SPN en el mes alcanzaron los $8.182.494 millones (+216,6% interanual -i.a.-). En lo que respecta a la recaudación tributaria, la misma presentó un crecimiento de +226,7% i.a. explicado principalmente por la variación del Impuesto PAIS y los ingresos correspondientes a los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social (+236,2% i.a.).
Entre los tributos ligados a la actividad económica interna cabe mencionar la recaudación correspondiente al Impuesto a las Ganancias (+213,0% i.a.), al IVA neto de reintegros (+196,9% i.a.), y los Débitos y Créditos (+277,5% i.a.).
En los primeros seis meses del año el gasto primario acumuló una reducción de 32% en términos reales. Los rubros que registraron las mayores bajas son Gasto de Capital (-82% i.a.), Transferencias Corrientes Discrecionales a Provincias (-75% i.a.) y Resto de Gasto Corriente (-43% i.a.), que incluye otras erogaciones como las transferencias para cubrir el déficit de parte de las empresas públicas.
Los subsidios económicos se redujeron 43% i.a., a pesar de las bajas temperaturas registradas desde mayo y de que los cambios en los cuadros tarifarios de energía eléctrica y gas en junio no impactaron en los números base caja del mes.
Los recursos destinados a la Asignación Universal para la Protección Social se incrementaron 16% i.a. en términos reales entre enero y junio, reflejando, junto a la Tarjeta Alimentar y el programa Primeros 1.000 días, el refuerzo en los programas sociales que llegan a la población más vulnerable sin intermediarios.
En lo referente al gasto en jubilaciones y pensiones, la reducción interanual en el acumulado de 6 meses se explicó fundamentalmente por el efecto de la fórmula de movilidad previsional vigente hasta marzo.
A partir de entonces, con el refuerzo del 12,5% otorgado en abril y el cambio a una actualización por inflación con menor rezago, los haberes previsionales comenzaron a crecer en términos reales.
Desde noviembre de 2023, la jubilación sin considerar bonos se incrementó 5%, luego de caer 30% real en los primeros 11 meses de 2023.
El haber medio del sistema se incrementó 2% real desde noviembre, tras exhibir una baja de 26% entre diciembre de 2022 y noviembre de 2023.